Las Naciones Unidas han documentado más de 2.500 casos de violencia sexual en los países actuales en conflicto en 2018. Se trata de una realidad que afecta a ambos sexos y en todas las edades, aunque tiene una incidencia mayor en mujeres y niñas. Con razón del Día Mundial contra la Violencia Sexual en los Conflictos, recogemos este y otros casos.
El término "violencia sexual relacionada con el conflicto" se refiere a la violación, la esclavitud sexual, la prostitución forzada, embarazo forzado, aborto forzado, esterilización forzada, matrimonio forzado y cualquier otra forma de violencia sexual de gravedad comparable vinculada (directa o indirectamente) a un conflicto. Así lo recoge el documento más reciente publicado por la ONU, titulado Violencia Sexual relacionada con Conflictos. Informe del Secretario General de las Naciones Unidas.
El informe se centra, principalmente, en casos documentados alrededor de 19 países en conflicto, 4 de ellos pasados, 13 actuales y dos que considera "situaciones adicionales de preocupación".
No obstante, la organización califica de "difícil" la determinación de la prevalencia exacta de esta realidad, debido a causas como, por ejemplo, la falta de información resultante de la "intimidación y la estigmatización de los supervivientes", así como las restricciones de acceso para el personal de la organización. Por ello, el informe se restringe a incidentes verificados por las Naciones Unidas y "no puede dar cuenta de la gran cantidad de incidentes no denunciados que ocurren en todo el mundo".
Violencia sexual en conflictos actuales
En cuanto a los datos referentes a países actuales en conflicto, solo en el año 2018 se han documentado más de 2.500 incidentes y casos. Estos, en sí mismos, afectan a una o más personas, como es el caso de los 122 en Darfur, una región situada en el sudeste de Sudán, que involucran a 199 víctimas.
Dentro de estos países, han llegado a documentarse más de 500 casos de violaciones e intentos de violación relacionada con conflictos.
En Birmania, la ONU tuvo acceso al caso de una violación de una niña de 8 años por parte de las Fuerzas Armadas del Tatmadaw Kyi. Pero añade varios casos difíciles de determinar que cifra como "masivos", como los efectuados por los soldados del Tatmadaw durante las operaciones en el Estado de Rajine y a los que una misión de la ONU tuvo acceso en septiembre de 2018.
Por sexos y por edades, las mujeres son las más afectadas por la violencia sexual en la República Democrática del Congo y la República Centroafricana, mientras que aparecen más niñas afectadas en Sudán (Darfur) y Somalia. En países como Sudán del Sur, los casos de violencia sexual en niños y niñas ascienden a 153, aunque no se puede determinar si son niños o niñas. Comparado los países donde figuran casos documentados en niños, la República Democrática del Congo es donde hay más menores de edad víctimas de la violencia sexual. Además, Colombia aparece entre los países en conflicto. La ONU recoge en su informe el número de personas que figuraron en 2018 como víctimas del conflicto colombiano en la Unidad Nacional de Víctimas, que asciende a 97.916. Entre ellas hay 254 víctimas de violencia sexual, de las que 232 son del sexo femenino, 214 mujeres y 18 niñas.
Además de estos países en conflicto, hay otros donde la ONU, si bien no da datos en concreto, sí que se hace eco de algunas situaciones. Son los casos de Iraq, donde durante 2018 las mujeres y niñas detenidas en esclavitud sexual siguieron siendo liberadas del control del Daesh; o Libia, de donde destaca la preocupación durante 2018 del destino desconocido de 17 mujeres y niñas que sufrieron violencia sexual en el centro de detención de Surman. En Siria, la ONU destaca el uso del matrimonio precoz y forzado en varias partes del país como mecanismo de defensa o de protección o las denuncias de miembros de grupos extremistas que imponían "formas medievales de castigo" a hombres acusados de homosexualidad.