El Ministerio Público pide 5 años y dos meses de prisión para Oriol Pujol, su mujer y el resto de acusados. Los acusa de mover hilos para adjudicar a dedo las estaciones de ITV y cobrar comisiones. Es uno de los últimos trámites para convocar el juicio.
El fiscal pide para Oriol Pujol dos años de prisión por tráfico de influencias y una multa de 250.000 euros. Un año y dos meses de prisión más por soborno. Y dos años de prisión por falsificación de documentos y una multa de 60.000 euros.
Según la acusación pública, Pujol "intervino directamente e indirectamente en las negociaciones por la venta de la planta de SC –una de las estaciones de Sant Cugat del Vallès– hablando con los dueños de la mercantil CI; facilitando el acceso al president de la Generalitat de Catalunya; así como facilitando el contacto con el director de la Agencia Tributaria catalana con la finalidad de obtener información fiscal en relación con la operación, y con altos cargos del Departament d'Empresa i Ocupació; coordinando llamadas y actuaciones con el acusado Sergi Alsina, e incluso fijando la estrategia de comunicación del éxito de la operación.
La Fiscalía también pide 3 años y cuatro meses de prisión para la mujer de Oriol Pujol, Anna Vidal, y 6 años y dos meses para Segi Alsina, amigo íntimo de Oriol Pujol.
Un plan perfecto
La Fiscalía atribuye a Oriol Pujol el diseño de un plan perfecto para adjudicar el nuevo mapa de estaciones de ITV a empresas amigas y cobrar comisiones. Los hechos se sitúan en el año 2011 y, según la Fiscalía, Pujol designa a Josep Tous como responsable de hacer el nuevo mapa de estaciones de inspecciones de vehículos de Catalunya "aprovechando su doble condición de presidente de su grupo parlamentario y de secretario general adjunto y posteriormente secretario general de CDC".
Tous tenía que hacer un proyecto que consistía en "denegar la autorización concebida" a la empresa Itevelesa SL, que era la adjudicataria de una parte del concurso público. La idea era "anularlo mediante una revisión de oficio, y finalmente ampliar el número de estaciones en veinticuatro, ofreciendo la cesión de determinadas estaciones a las empresas que tenían interpuestos recursos contenciosos-administrativos y otras operadoras interesadas".
Sergi Alsina y otro acusado, Sergi Pastor, dirigidos por Oriol Pujol, constituyeron una sociedad que optaba a algunas de las estaciones y, según el fiscal, para que quedara "favorecida en el reparto de los lotes, aprovechando tanto los acuerdos a los que se llegó con el acusado Josep Tous, como con las empresas interesadas en el concurso, como las influencias políticas de Oriol Pujol Ferrusola". La sociedad se constituye nombrando a Sergi Pastor como director general.
El Ministerio Público acusa a uno de los empresarios, Ricard Puignou, de "retribuir mensualmente al acusado Sergi Alsina con cantidades que oscilaban entre los 11.800 y 23.600 euros", entre diciembre del 2010 y febrero del 2012, "a cambio de sus influencias políticas". Sergi Alsina era íntimo amigo desde la infancia de Oriol Pujol.
Según la Fiscalía, Sergi Alsina habría pagado, también a Josep Tous, 2.360 euros, desde marzo del 2011 hasta febrero del 2012, "para ganarse su favor". Los pagos finalizaron porque los detuvieron.
El papel de la mujer de Oriol Pujol
Anna Vidal asesoró sobre algunas empresas. Facturó 236.000 euros en concepto de análisis financieros e industriales de empresas que pudieran operar en la planta de Sant Cugat del Vallès. El concepto de la factura era “a cuenta de honorarios objetivos según contrato de servicios”, y el contrato con fecha del 8 de noviembre del 2010 no se envió hasta el 11 de octubre del 2011. Prácticamente un año después. Según la Fiscalía, "el trabajo efectivamente realizado por la acusada se limitó a aportar información manuscrita con apuntes y referencias sobre empresas candidatas", que según el Ministerio Público se pueden encontrar "fácilmente en internet".
Finalmente, la empresa que se contrata es la de Sergi Alsina, amigo íntimo de Pujol Ferrusola. La Fiscalía atribuye al hijo del expresident la operación y dice que "la intervención, tanto al inicio de la operación, como en su desarrollo y en su final, fue intensa, decisiva y claramente beneficiosa para los tres implicados gracias a los relevantes cargos políticos que ostentaba".
La Fiscalía atribuye los pagos a Anna Vidal como compensaciones a Oriol Pujol para agradecer los contactos y gestiones: "Con la finalidad de gratificar la tarea realizada por el acusado Oriol Pujol Ferrusola, el acusado Sergi Alsina contrataba aparentemente los servicios de la acusada Anna Vidal Maragall en concepto de asesoría, a cambio de retribuciones económicas ingresadas en las cuentas bancarias de la misma por su tarea de asesoramiento ficticio".