Los expertos vaticinan que la implantación de la inteligencia artificial (IA) acabará con algunas profesiones, una profecía que está más cerca de algunos oficios que de otros. Entre las primeras a reaccionar a esta tecnologización de las profesiones, incluso las creativas, han sido los actores de doblaje. El colectivo ve en peligro su trabajo, ya que esta tecnología puede utilizar el timbre de voz del actor original y adaptarlo a otro idioma sin que se note y, por lo tanto, desprendiéndose del trabajo de los actores de doblaje.
Ante esta situación, el sindicato de Actores de Veu y Voice Talents (AVTA) en Madrid han hecho público un comunicado en que alertan de la situación. El detonante para denunciar este peligro por su profesión ha sido la convocatoria de actores hace unas semanas por parte de un estudio madrileño para grabar emociones, el único matiz que las máquinas no pueden generar.
En el comunicado, se proponen medidas para proteger el sector. Por ejemplo: "Crear la legislación necesaria de acuerdo con la necesidad anunciada por el Comisario Europeo de Mercado Interior de 'fijar que sea obligado que las IA se identifiquen siempre que lo son'". Jaime Roca, presidente de AVTA, ha subrayado en El País: "Aunque nunca es blanco o negro, tiene la capacidad de sustituirnos a todos y no lo podremos frenar. Dará oportunidades, pero hay que regularlo".
Poner el freno temporalmente en la IA
Expertos tecnológicos, científicos, políticos y empresarios se han unido para firmar conjuntamente una carta que alerta de los peligros de desarrollo desenfrenado de la inteligencia artificial (IA). Sin embargo, la carta no es solo una queja, también es propositiva. Se propone que los experimentos actuales d'IA se suspendan durante seis meses. ¿Por qué? Para tener tiempo para valorar los potenciales riesgos de esta tecnología y generar un marco legal sólido en torno a la IA.
La sociedad ha hecho una pausa en otras tecnologías con efectos potencialmente catastróficos a la sociedad. Podemos hacerlo aquí. Disfrutamos de una larga pausa veraniega de la IA y no nos apresuramos a caer sin estar preparados", se acuerda en la carta de que lleva firmas de figuras tan destacadas como el director ejecutivo de Tesla, Elon Musk, el cofundador de Apple Steve Wozniak, los investigadores norteamericanos Yoshua Bengio, Stuart Russel o los españoles Carles Sierra y Ramón López De Mantaras. "La IA avanzada podría representar un cambio profundo en la historia de la vida a la tierra, y se tendría que planificar y gestionar con el cuidado y los recursos correspondientes", se remarca en la misiva.