Las playas del área metropolitana de Barcelona hacen de reserva natural de mariposas, según los resultados del tercer informe del Observatori Metropolità de Papallones (mBMS). El estudio también indica que la vegetación dunar es clave para la proliferación de determinadas especies que no han encontrado en los parques su hábitat más propicio. Concretamente, la investigación del mBMS cifra en 2.205 el número de mariposas de 40 especies diferentes en un total de 21 espacios, hecho que corresponde al 20% de las especies presentes en Catalunya.

En las cuatro playas analizadas (Castelldefels, Gavà, Viladecans y el Prat) se han reconocido diecisiete tipos de mariposas diferentes. En este sentido, las más numerosas son la blaveta común, la migradora de los cardos y la safranera de la alfalfa. La migradora de los cardos y la safranera de la alfalfa son más dominantes en las playas que en los parques. Según las conclusiones del informe, los espacios de la costa son "especialmente importantes para la conservación de las mariposas en el territorio de la metrópolis" porque algunas especies que en los parques no son dominantes, son las más abundantes en las playas.

El coordinador científico del estudio, Jordi Pino, afirma que el impacto de los paisajes dunares en la población de mariposas ha sido un descubrimiento "inesperado", ya que las playas son espacios con condiciones "extremas", donde prolifera un tipo de vegetación que no es propenso al crecimiento de comunidades de insectos. "Son espacios que ahora complementan la red de parques en la conservación de la biodiversidad", asegura Pino. En esta línea, la técnica de promoción y conservación de espacio público del AMB, Núria Machuca, subraya la importancia de estos espacios en un entorno "altamente poblado y urbanizado".

Con respecto a los parques urbanos, se han examinado diecisiete y las tres especies de mariposas más comunes son la blanquita de la col, la blaveta común y la barrinadora del geranio. Esta última especie es invasora y ha llegado relativamente hace poco. Los tres parques del Àrea Metropolitana de Barcelona con más variedad de especies son el de los Pinetons, en Ripollet, el parque del Canal de la Infanta de Cornellà y el parque del Calamot de Gavà.

Con todo, el estudio señala que la vegetación de playas y dunas convierte el litoral metropolitano en una zona de gran biodiversidad, tal como lo son los parques con menos intervención humana, sometidos a pocas siegas, sin riego y libres de herbicidas y fitosanitarios. Así pues, desde el AMB apuestan por los prados naturales con el fin de ayudar a los ecosistemas que viven allí. Estos nuevos datos sobre la población de mariposas en las playas y parques del AMB corresponden a la observación de 2021. Y para este 2022, el estudio se amplía con la incorporación de cinco nuevos espacios, todos ellos parques. El mBMS está impulsado por el Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB), el Institut d'Estudis Regionals i Metropolitans de Barcelona (IERMB) y el centro de investigación en ecología CREAF.