La plataforma Alto el Fuego a l'Albera critica que el Ayuntamiento de Sant Climent Sescebes (Alt Empordà) promocione una jornada de puertas abiertas el sábado 1 de junio en la base militar con juegos para niños. En un comunicado, la entidad denuncia que en el programa hay niños subidos a vehículos militares y manipulando armas y califican el acto "de enaltecimiento del militarismo". Por eso, piden al Ayuntamiento que se desvincule y "haga una declaración específica de compromiso con los valores de la paz y la no violencia". El alcalde, Marc Salas, defensa que el Ayuntamiento solo ayuda a difundir el acto, que no se utilizarán armas reales ni "se tirarán tiros" y recuerda que la base forma parte de la historia del municipio.

La entidad dice que recibieron el cartel a través de una comunicación por whatsapp por parte del Ayuntamiento. La convocatoria de la jornada de puertas abiertas está prevista para el 1 de junio coincidiendo con el Día de las Fuerzas Armades y prevé actividades desde las 10 de la mañana hasta las cuatro de la tarde a pesar de que, posteriormente, se hará un desfile y un homenaje a los "caídos".

El cartel polémico / Foto: ACN

El programa incluye una exposición de vehículos, armamento, material militar y del cuerpo nacional de policía, una visita guiada al museo histórico, una exhibición de combate cuerpo a cuerpo de las Fuerzas Armadas y una degustación de paella. También se han programado actividades infantiles como "tiro con carabina, pista de aplicación o un taller de pintura de cara".

Niños manipulando armas

"Denunciamos que el ejército haga actividades con menores y que el ayuntamiento haga promoción con uso de su imagen en el programa -aparece el logotipo municipal- y difusión entre los vecinos del pueblo", afirman desde Alto el Fuego a l'Albera.

En este sentido, recuerdan que en los últimos años se han vivido varios incidentes con la base: "prácticas con proyectiles y munición que caían en fincas vecinas del campo de tiro; incendios forestales ocasionados por sus actividades o maniobras con armas largas por las calles del mismo pueblo de Sant Climent y que comportó que la alcaldesa en aquel momento pidiera explicaciones". Además, recuerdan "el papel" que el equipamiento, dicen, jugó el otoño del 2017 "acogiendo grupos de la Policía Nacional y la Guardia Civil".

"Alto el Foc a l'Albera queremos evidenciar que actos de enaltecimiento del militarismo como lo que se ha programado para el 1 de junio entran en contradicción con la voluntad de encontrar soluciones pacíficas a los conflictos", remarcan. Por eso, dicen que encuentran "muy grave" que "se haga apología militar de una forma engañosa entre menores de edad y especialmente indignante es que el mismo ayuntamiento de Sant Climent sea cómplice de esta convocatoria".

Piden que el ayuntamiento se desvincule del acto

Por todo ello, reclaman al equipo de gobierno que se desvincule del acto, que "haga una declaración específica de compromiso con los valores de la paz y la no violencia y que comparta con sus vecinos esta voluntad con la misma publicidad, como mínimo, que se utilizó para anunciar este acto".

Parte de la historia del pueblo

Por su parte, el alcalde del municipio, Marc Sala, asegura que no han participado en la organización del acontecimiento y que solo ayudan a hacer "difusión". En este sentido, dice que entiende que "enseguida, salten todas las alarmas", pero insiste en que hay "que "contextualizar" porque la base forma parte de la historia del municipio. "Mucha gente ha hecho la mili", recuerda. 

"Yo no estoy a favor de las armas ni de los conflictos bélicos, pero la base hace tiempo que está y se tiene que reconocer que gracias a ella el pueblo ha podido salir adelante", asegura. En este sentido, dice que los militares los ayudan cuando lo necesitan y pone como ejemplo el montaje de las tiendas de campaña para hacer 'La Passió'. "El objetivo es explicar lo que hacen y quieren abrir las puertas de la base a fuera para ver que se hace", insiste Sala. Con todo, dice que son "vecinos" y tienen que convivir. "Entiendo la postura de ciertas organizaciones, pero la realidad que vivimos es diferente", añade. Sala, además, dice que la actividad puede atraer visitantes al municipio y a los cuales desde la base se ha invitado a los comerciantes del pueblo a participar vendiendo sus productos.