La policía nacional de Catalunya son los Mossos d'Esquadra. Y la policía integral de un país patrulla, también, el mar. Es lo que los Mossos d'Esquadra y el departamento de Interior entienden que tienen que hacer los Mossos d'Esquadra en las aguas territoriales y la costa de Catalunya: patrullar y ejercer sus competencias. Este 2022 ha sido el primer verano que la Policía Marítima de los Mossos d'Esquadra se ha desplegado por todo el territorio con tres nuevas embarcaciones y dos lanchas. Este viernes, en el Puerto de la Ametlla de Mar, en el Baix Ebre, el conseller del Interior, Joan Ignasi Elena, y el comisario jefe, Eduard Sallent, han hecho valoración del primer verano de la Policía Marítima y han anunciado que la intención es ir a más. Durante los próximos más se iniciará la segunda fase del despliegue de esta unidad marítima con el objetivo, aunque no han puesto plazos temporales, poder patrullar el litoral catalán los 365 días del año, las 24 horas del día. En el acto ha participado también el director de la Policía, Pere Ferrer, y el intendente jefe de la Región Policial de las Tierras del Ebro, Joan Carles de la Monja.

El anuncio se ha hecho desde este puerto de las Terres del 'Ebre, que es también una de las tres bases que tienen actualmente los 50 agentes de la Policía Marítima. En la Ametlla de Mar fue el último puerto donde se recibió una de las tres nuevas embarcaciones. En este caso, Josefina Castellví, la tercera de las lanchas patrulleras, que adquirieron los Mossos d'Esquadra en la desde hoy superada primera fase del despliegue de la Policía Marítima. Además de estas tres embarcaciones, también se ha contado con la Thalassa, una lancha semirrígida que fue confiscada a un grupo de narcotraficantes, que ha tenido la base en Barcelona.

Imagen de una agente de la Policía Marítima de los Mossos / Cedida

Durante el periodo veraniego, las cuatro embarcaciones han cubierto acontecimientos deportivos y lúdicos, han auxiliado usuarios del mar en situación de peligro y también han dado respuesta a problemáticas sobrevenidas, como el rescate o preservación de especies marinas con dificultades en su propio hábitat, ha explicado la portavoz del cuerpo, Montserrat Escudé. Los patrullajes también se han hecho este verano de manera coordinada con los Agentes Rurales en la zona norte país y se prevé que durante los próximos meses se haga también en aguas marítimas del sur de Catalunya, en concreto en el Delta del Ebro.

Con el fin de aumentar la versatilidad a la hora de actuar desde las embarcaciones policiales, dentro de la tripulación se ha introducido la figura del rescatador, aprovechando que los integrantes de la Unidad de la Policía Marítima disponen de una formación específica para tirarse en el agua y así dar respuesta a cualquier servicio que lo requiera, especialmente con respecto al rescate y salvamento.

Por tierra, aire y mar

A pesar de la batalla por las competencias con la Guardia Civil, los Mossos d'Esquadra, también en el mar, despliegan todas sus capacidades para ejercer las competencias de manera expansiva y con intención de ir a más. La segunda fase de despliegue también contempla buscar una nueva embarcación, estilo patrullera, con más capacidades, que sería el que se convertiría en la nave insignia de la Policía Marítima de los Mossos d'Esquadra. El Área Marítima, que quedará englobada en la Comisaría General de Intervención en la nueva estructura de los Mossos, es una apuesta política y policial para seguir desplegando a la policía nacional por tierra, aire y también mar.

Hasta ahora, sin embargo, durante las 2.492 horas de patrullaje marítimo que han hecho las Cap de Creus, Josefina Castellví, Narcís Monturiol i Thalassa, se han hecho sobre todo servicios de carácter asistencial y no consta que, más allá de algún acompañamiento de droga confiscada, justamente en las Tierras del Ebro, no hayan participado en ninguna investigación penal. La noche de Sant Joan en una playa de Tarragona se rescataron dos bañistas, padre e hija, desaparecidos en el mar. El 20 de julio se dio asistencia a un velero amarrado cerca de la playa de Llafranc dado que un hombre de avanzada edad necesitaba asistencia médica y el 20 de agosto rescataron con vida a una persona desaparecida al mar que había caído desde un catamarán a una milla de una playa de Castelldefels.

Resumen del primer verano de la Policía Marítima

El balance de la actividad policial de estos tres meses de verano se traduce en 294 personas identificadas, la tramitación de 154 actos por infracciones administrativas, 55 servicios de protección de acontecimientos marítimos, 35 inspecciones en empresas del sector, 24 servicios de búsqueda, localización y salvamento de personas, 16 simulacros o ejercicios conjuntos con otros organismos, 14 remolques de otras embarcaciones y 37 asistencias o auxilio de diversa tipología en embarcaciones y personas en el mar.