Gracias al El Periódico de este viernes cualquier diario puede titular sin exagerar: "La ministra Sánchez miente" o "La ministra Sánchez engaña". El diario abre portada con una información que enrojece la cara de la titular de Transportes del gobierno español y la de los responsables de Adif, el ente estatal que gestiona las infraestructuras ferroviarias (vías, estaciones, señalización...). Explica El Periódico que la línea R2 Sur de Rodalies no estará del todo recuperada hasta septiembre y que los expertos dudan de que la causa de la avería fuera un rayo. Todo lo contrario de lo que ha dicho Raquel Sánchez este jueves: "Una polémica generada artificiosamente", causada por "un hecho fortuito" y que "no es un problema de falta de inversión". Y la guinda del pastel: "La gestión desde Catalunya no evitaría incidencias como esta". El día antes, Adif mantenía la teoría del rayo, excluía la falta de inversiones y prometía recuperar el servicio "en tres o cuatro semanas". Todo peor que mentira, porque la información de El Periódico proviene de un informe de la misma Adif.
Para más inri, el Servei Meteorològic de Catalunya indica que "no hubo rayos en el municipio de Gavà ni en los de los alrededores" el día de "la enésima incidencia en Rodalies", como la llama El Periódico. El Punt Avui tampoco suelta el tema y abre su portada con datos que no por conocidos son menos interesantes. Una: se han contabilizado incidencias en la infraestructura ferroviaria el 85% de los días de los últimos ocho meses. Dos: en quince años se ha ejecutado el 24% de la inversión presupuestada en Catalunya. En Madrid, un 153%. También cabe recordar que las dos únicas dimisiones de peso en el ministerio de Transportes no las ha provocado el histórico ahogo inversor de Catalunya sino la compra de 31 trenes que no pasaban por los túneles de la red de cercanías de Cantabria y de Asturias. A ver cómo se las ingenian para explicarlo.
El Ara también mantiene el tema en portada, aunque sea con menos sustancia noticiosa. Añade a los usuarios del servicio, los que sufren de verdad el caos que la ministra intenta esconder. "Siempre pasa alguna cosa", comenta resignado el viajero del titular. La Vanguardia es el único diario que no dice ni mu en portada. El jueves lo llevaba pequeño al fondo de la portada y descrito como "una disputa política". Este viernes todo muere en un faldón de la página 28 donde se explica que los autobuses alternativos "aligeran el colapso", como quien trata de una anécdota. La R2 Sud o línea del Garraf no es cualquier vía. Es una de las más frecuentadas: 134.000 usuarios en días laborables, 261 trenes diarios. Conecta 34 estaciones entre la de Francia, en Barcelona, y la de Sant Vicenç de Calders vía El Prat, Gavà (de donde es la mismísima ministra), Castelldefels y Vilanova i la Geltrú.
Da la impresión de que a La Vanguardia le cuesta hablar de la cosa. Hace dieciocho días, dos periodistas de Madrid entrevistaron a la ministra para que hiciera la propaganda de la nueva Ley de Vivienda. Son veinte preguntas y solo una, genérica, sobre la cosa: "En qué situación se encuentra el diálogo con la Generalitat de Catalunya con respecto al traspaso de Rodalies?". La ministra la remata a puerta vacía sin decir nada. Claro, esa entrevista es muy reciente y es lógico que a un diario bien educado le cueste ahora hablar de la confusión de Rodalies, un tema que hace ruido en el actual ambiente de concordia, diálogo y reencuentro. Es demasiado pronto para ensuciar el relato de la ministra, que estará muy agradecida en el diario y sabrá hacérselo notar.