Había muchas esteladas en la manifestación de este sábado, pero también banderas españolas, que partidos com el PP se organizaron para repartir. Sin embargo, en la prensa editada en Madrid este domingo sólo hay ojos para las primeras. Y para la pitada al rey español Felipe VI, que ni siquiera fue por motivos nacionales ni instigada sólo por el independentismo, sino por su relación con países como Arabia Saudí, acusado de financiar el Estado Islámico. La conclusión: el independentismo "boicoteó" la unidad contra el terrorismo.
"Independentismo por encima de las víctimas", titula El Mundo, que asegura que "la Generalitat y colectivos separatistas orquestaron una encerrona para abuchear y cubrir de esteladas el paso del Rey y el Gobierno" y que "el recuerdo a las víctimas y la condena a los terroristas quedan desdibujados en una marcha de medio millón de personas". En su editorial ('Ni miedo ni respecto a las víctimas'), el diario liberal sostiene "los agitadores independentistas ayer fueron demasiado lejos en su actitud injuriosa, con la lamentable cobertura de dirigentes políticos del nacionalismo y de formaciones como Podemos".
Por su parte, El País asegura en su primera plana que "el independentismo boicotea la marcha unitaria de Barcelona". Y en el subtítulo añade: "Cientos de miles de personas se manifiestan contra el terrorismo, en una protesta con numerosas proclamas de carácter separatista contra el Rey y el presidente del Gobierno". El título escogido por el cronista - "Barcelona protesta contra el terror entre abucheos al Rey y esteladas" - es más moderado. En su editorial ('Barcelona somos todos'), el diario critica que "el fanatismo independentista rompió la unidad imprescindible".
En la misma línea, La Razón abre con una imagen del Rey saludando a miembros de la cabecera de la manifestación y afirma que "los separatistas intentan boicotear la marcha de la unidad". En el artículo firmado por el equipo editorial, el diario dirigido por Francisco Marhuenda sostiene que "la unidad fue un espejismo" y que "ahora sabemos que el único interés del independentismo era repudiar la unidad que se les estaba ofreciendo y la solidaridad de la sociedad española".
Finalmente, ABC abre con un primer plano de Rajoy, el Rey y Puigdemont. "España, con Barcelona a pesar del boicot independentista", titula el rotativo, que afirma que "los abucheos y pitidos de manifestantes instigados por el frente separatista intentaron enturbiar la unidad en la marcha frente al terror".
El Rey, "en la boca del lobo"
En la prensa digital editada en Madrid, también hay espacio para las críticas. Es el caso de El Español, que publica un editorial demoledor. Sin embargo, el blanco de sus ataques no es el independentismo, sino "la debilidad del Estado" y el "grave error del Rey". Según el diario de Pedro J. Ramírez, el error fue del Rey por acudir a la convocatoria. "Un rey no es un manifestante. Felipe VI no está para acudir a manifestaciones y menos a una como esta", asegura.
"La cara de Jaime Alfonsín [jefe de la Casa Real], immediatamente detrás del agente con pinganillo pegado a la espalda del Rey, era todo un poema", sostiene el diario digital, que añade: "Una cosa es afrontar una pitada durante un minuto, en un acto de asistencia poco menos que obligada como la final de Copa, y otra meterse voluntariamente en la boca del lobo, excitándole a que abra más sus mandíbulas y afile sus colmillos ante la candidez de la presa".
También tiene palabras para el gobierno de Mariano Rajoy, que fue "incapaz de movilizar a la ciudadanía con mensajes alternativos a los de los independentistas". En este sentido se pregunta "para qué existe la Delegación del Gobierno en Cataluña".
Salir de Madrid
La "unidad" en las portadas y editoriales de la prensa editada en Madrid la "boicotea" la prensa de otros puntos del Estado que, más allá de la polémica guerra de banderas y el abucheo, destacan que medio millón de personas salieron a las calles a gritar "no tenim por". Desde Galicia hasta el País Vasco, pasando por Andalucía y el País Valenciano.