La primavera volverá a ser "complicada" para los alérgicos, según las previsiones de la Xarxa Aerobiològica de Catalunya (XAC). Aunque con la sequía se podría pensar que los niveles de polen caerían, la realidad es justamente la contraria. La coordinadora de la XAC, Jordina Belmonte, explica que las plantas están haciendo unas "explosiones florales" muy importantes y la cantidad de polen que se recogen en los diferentes captadores que hay repartidos por todo el país superan ya las medias históricas registradas desde 1994. Con la sequía, detalla, las plantas "ponen mucho más esfuerzo" en reproducirse y las cantidades de polen que se liberan son "extraordinarias". Incluso personas que nunca han sufrido alergia ahora la podrían desarrollar.
Además de la polinización excepcional fruto de la sequía, el calendario habitual tampoco se ha visto alterado como consecuencia de las altas temperaturas y las plantas han liberado el polen en el momento que acostumbran a hacerlo. No hay, por lo tanto, ni retrasos ni adelantos en la polinización.
El periodo de alergia empezó en enero
El periodo de alergia se inició en enero, especialmente por el ciprés, y se puede extender hasta bien entrado en abril con respecto a las polinizaciones invernales, que incluyen también especies como el avellano o el fresno. Las primaverales, especialmente plátano, parietaria y gramíneas, seguirán también su calendario habitual. Según las previsiones de los biólogos, esta semana empezarán a liberarse "cantidades notables" de polen y se hace un llamamiento a que las personas que sufren alergias tomen las medidas de protección oportunas para minimizar todos los síntomas. En este sentido, la coordinadora de la XAC, Jordina Belmonte, recuerda que la "suerte" de las alergias es que puede "aprender" a controlarlas: "Eso incluye salir con mascarilla cuando esté la planta que nos afecta". Toda protección en nariz y boca, detalla, "aleja" las proteínas de la planta que provocan el malestar.
Dos millones de personas con enfermedades alérgicas respiratorias
Las enfermedades alérgicas son una preocupación de salud pública por su fuerte impacto en la demanda. La más frecuente es la respiratoria y en Catalunya se estima que dos millones de personas sufren alguna. La cifra, según la Societat Catalana d’Al·lergologia i Immunologia Clínica (SCAIC), se doblará en el 2050. Este mismo organismo estima que un 25% de la población sufre rinitis y un 12% asma alérgico, provocados mayoritariamente por el polen. En los dos casos la edad media de los pacientes es de entre 29 y 30 años, aunque en el caso de los asmáticos hay también picos entre la población pediátrica, entre los 5 y los 15 años.