Las carreteras con más complicaciones durante la operación regreso por el puente de la Purísima han sido la C-16, que ha acumulado durante la tarde 17 kilómetros de retenciones en sentido sur, hacia Barcelona, a la altura del Berguedà; y la AP-7, que a causa de un accidente en Vandellòs i L'Hospitalet de l'Infant (Baix Camp) y una avería en Martorell (Baix Llobregat) ha sufrido cortes y largas colas. A esto hay que sumar que la nieve ha obligado al uso de cadenas y a cortar varias carreteras. La mayoría de conductores han decidido anticipar el regreso al área metropolitana por la mañana y primera hora de la tarde, y de los 240.000 previstos, 221.000 ya habían regresado al área metropolitana de Barcelona hasta las 20 horas.
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Los tramos más complicados en la C-16 han sido de Bagà en la Nou de Berguedà y entre Cercs y Berga, donde la carretera ya se convierte en una autovía con dos carriles por sentido hacia el sur. En la boca norte del túnel del Cadí, en la Cerdanya, ha habido más caravana, una situación que se ha reproducido en la C-55 desde el Bages hacia el área de Barcelona. También ha habido intensidad en sentido Barcelona en la C-17. Concretamente, seis kilómetros desde la Garriga a Tagamanent (Vallès Oriental) y otros dos en Malla (Osona).
La AP-7 ha llegado a acumular hasta 21 kilómetros en varios tramos. Un coche averiado ha provocado colas de hasta 11 km entre Martorell y Subirats por un coche averiado, mientras que en el Alt Penedès se han registrado cuatro y en el Montsià, seis. A las 19.15 horas un accidente grave en la N- 420 en Móra d'Ebre en el que murió un menor ha cortado la vía en ambos sentidos de la marcha. La A-2 también ha sufrido retenciones de hasta 13 kilómetros en sentido este entre Esparreguera y Bruc, pero Trànsit ha explicado que la situación ha sido de un 20% menos de retenciones que en 2019, que es el año de referencia, y el pico máximo de colas ha sido de 96 kilómetros en total, cuando en 2019 fue de 210.
Obligatoriedad de cadenas
En cuanto a las afectaciones por nieve, se han cerrado varias vías: la N-260 en Portbou, la BV-4024 de Guardiola de Berguedà a Bagà, la BV-4031 por el Coll de la Creueta (Berguedà), entre Castellar de n'Hug y Toses y la C-28 en el Puerto de la Bonaigua, que une el Pallars y el Vall d'Aran. Además, es obligatorio llevar cadenas para pasar por la C-142b en el Pla de Beret, la C-28 por el Refugi d'Ares y Esterri d'Àneu, la N-141 en Bossòst (Vall d'Aran) y L -501 de Taüll en el Pla de l'Ermita.
Alerta por nieve y viento
Este domingo, el servicio de Protecció Civil de la Generalitat mantiene activados el sistema de alerta VENTCAT y NEUCAT por el temporal, que todavía no se ha marchado. Se esperan también fuertes ventoleras, como las que han dejado de más de 1.500 incidencias este sábado a todo Catalunya, una abrupta bajada de las temperaturas y más nevadas en el Pirineo. La nieve podría superar los 30 centímetros en cotas superiores a los 900 metros y 70 cm por encima de los 2.000 metros. Las autoridades catalanas instan a extremar la precaución en la movilidad y si se hacen actividades en el exterior. "Si es imprescindible hacer desplazamientos, se tiene que tener mucha precaución porque se pueden encontrar obstáculos en la vía", apunta Protecció Civil. También se insta a ser prudentes en los adelantamientos y mantener las distancias laterales adecuadas con los otros vehículos.