El movimiento estudiantil a favor de Palestina iniciado en las universidades de los Estados Unidos llega a Catalunya. Organizaciones estudiantiles propalestinas han convocado la primera acampada en la Universidad de Barcelona para los próximos 6, 7 y 8 de mayo en el Campus Rava. El objetivo es denunciar la "complicidad" de la universidad, el Gobierno y la Generalitat con Israel y reclamar el "fin de la represión" al movimiento que defiende Palestina. Estas jornadas, que organizan la Red Universitaria por Palestina, la Plataforma Universidades con Palestina y el Comité Estudiantil de solidaridad con el Pueblo Palestino, empezarán el lunes con una asamblea, continuarán el martes con una rueda de prensa y una charla en qué darán a conocer los argumentos detrás del boicot académico. Finalmente, el miércoles celebrarán un claustro extraordinario por Palestina. Se prevé que estas dos noches los participantes acampen en el mismo campus universitario.
Poner fin a los convenios con universidades israelíes
Alys Samson Estapé, portavoz de la plataforma Prou Complicitat amb Israel, ha explicado en declaraciones al programa Els Matins de 3Cat, que el boicot académico que se quiere impulsar desde las universidades catalanas tiene como objetivo acabar con los convenios de colaboración y los proyectos conjuntos con universidades israelíes, ya que argumentan que estas instituciones "forman parte del genocidio", por ejemplo, con el desarrollo de armas que posteriormente se utilizan en la Franja de Gaza. "Si Israel puede seguir cometiendo los crímenes de apartheid, colonización, ocupación y genocidio, es gracias a las relaciones internacionales y por la complicidad de instituciones, empresas y universidades," ha apuntado a la portavoz.
Esta plataforma ha organizado, junto con la Comunidad Palestina de Catalunya, movilizaciones semanales para pedir el fin de la ofensiva de Israel sobre Gaza y el fin del comercio de armas desde el pasado mes de octubre. Ahora, la explosión de movilizaciones en las universidades estadounidenses, que han llegado a paralizar los centros, ha incentivado la movilización de estudiantes por todo el mundo, y aunque en Catalunya todavía no se han visto acampadas o protestas a esta escala, se prevé que se incrementen en los próximos días.