El Real Madrid ha suspendido los conciertos previstos en el estadio Santiago Bernabéu hasta marzo del 2025, según ha adelantado Relevo y ha confirmado el Ayuntamiento de la capital española. La maniobra del club después de meses de quejas de los vecinos de la zona, en el madrileño barrio de Chamartín, por el ruido excesivo y los problemas de incivismo durante las jornadas de conciertos de Taylor Swift, Karol G o Luis Miguel en el estadio. Las medidas de decibelios de la policía local habían constatado que efectivamente no se cumplían los límites legales de ruido. Se ven afectadas de esta manera las actuaciones de Aitana, Lola Índigo, Dellafuente o también un festival de K-Pop. Durante este tiempo sin conciertos, el Real Madrid hará las obras necesarias para adecuar la insonorización del estadio.
Recientemente, en julio, el juzgado de Instrucción número 53 de Madrid admitió a trámite una querella presentada por la Asociación Vecinal 'Perjudicados por el Bernabéu' contra 'Real Madrid Estadio SL', la sociedad que gestiona el campo del conjunto blanco, por el "ruido excesivo" de los conciertos. Los vecinos, constituidos en asociación y muy activos en las redes sociales, hace meses que batallan con el Ayuntamiento de la capital española por las consecuencias de los acontecimientos masivos que se celebran en el estadio del Real Madrid: ruido hasta tarde, suciedad que dejan los asistentes en las calles, aglomeraciones de gente o la insalubridad que comporta que la gente orine en la calle o en los portales próximos al estadio.
En concreto, los vecinos remiten en su querella a los conciertos de Taylor Swift el 29 y 30 de mayo; el de Duki el 8 de junio; el de Manuel Carrasco el 3 de julio, y los de Luis Miguel los días 6 y 7 de julio, en los cuales se habría superado el nivel de ruidos permitido, sostiene la asociación vecinal. Después, las cuatro noches de Karol G, en una de las cuales murió una persona por una pelea entre asistentes y, recientemente, el grupo Aventura. La denuncia de los vecinos sostiene que estos conciertos, celebrados después de la remodelación del coliseo blanco, constituyen un delito medioambiental y afirma que "desde el primero" se han excedido los límites de emisión de ruidos establecidos en la normativa municipal, sin adoptarse "ninguna medida en el edificio para evitar las indeseables consecuencias".
El Ayuntamiento de Madrid, que encabeza José Luis Martínez-Almeida, medió con el club y acordaron no hacer más de veinte grandes conciertos en el año. El club, por su parte, se comprometió a hacer las reformas necesarias para evitar el ruido excesivo, con pantallas aislantes. Con todo, los vecinos se mantuvieron en pie de guerra, dado que la situación no ha cambiado en todo el verano. Ya ha habido las primeras reacciones. La líder del PSOE en Madrid, la exministra Reyes Maroto, ha celebrado la cancelación de los conciertos como una victoria de la movilización vecinal. Por su parte, la cantante Lola Índigo, uno de los conciertos suspensos, ha publicado una piada en la cual afirma sentirse triste miedo la noticia.