Agentes de la Policía Nacional han detenido en Barcelona y en Figueres cinco miembros de una organización criminal dedicada al tráfico de mujeres de nacionalidad china para su posterior explotación sexual en pisos de estas ciudades.
Las víctimas residían en los mismos pisos en los cuales eran explotadas y tenían que estar disponibles durante 24 horas al día sin poder salir, teniendo absolutamente coartada su libertad de movimiento.
Sólo se pudieron constatar algunas salidas de las víctimas, aseguran los agentes, cuando eran intercambiadas por los proxenetas entre los diferentes pisos de la organización, con la finalidad de variar la oferta disponible para los clientes e incrementar así los beneficios obtenidos de su explotación.
En estos edificios, los detenidos también se encargaban de hacer la selección, distribución y reparto de las víctimas entre sus diversos clientes.
Operación contra el tráfico de seres humanos
La investigación empezó hace casi un año a raíz de la detención de dos ciudadanos chinos en La Línea de la Concepción (Cádiz) que viajaban hacia Gibraltar con pasaportes falsificados de Malasia. La investigación los llevó hasta una organización que traficaba con mujeres chinas para su explotación sexual.
La rama de la organización asentada en España estaba formada por tres mujeres de nacionalidad china y dos hombres, uno chino y otro español, que se encargaban de hacer todas las gestiones necesarias para el control de dos domicilios a Barcelona y Figueres.
La operación se enmarca dentro del Plan de la Policía Nacional contra el Tráfico de Seres Humanos con Finalidades de Explotación Sexual, puesto en marcha en el 2013, y que dio lugar a la creación de la Brigada Central contra el Tráfico de Seres humanos, adscrita a la Comisaría General de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional.