El sector turístico de Catalunya es optimista con la campaña de Semana Santa. Hay "muy buenas perspectivas", tanto en la costa como en la montaña. Sobre cifras de ocupación, desde el sector apuntan que se podría llegar a superar los datos de la prepandemia, en concreto, las correspondientes al año 2019. En declaraciones en EFE, la Associació Catalana d'Estacions de Muntanya prevé una buena afluencia de esquiadores por el hecho de que todavía hay bastante nieve, pero tampoco se atreven a vaticinar si se llegará al lleno total porque, en función del tiempo, es posible que otras personas se inclinen por destinos del litoral.
La previsión por demarcaciones
En la Costa Brava, la gerente de la Unió d'Empresaris d'Hostaleria i Turisme de la Costa Brava Centre, Judith Lloberol, estima que podrían superar el número de turistas que tuvieron por Semana Santa el año 2019. En este sentido, precisa que, entre semana, prevén una ocupación del 60% y, en el caso del fin de semana, se podría elevar hasta el 85%. Sea como sea, estas cifras pueden variar por la llegada de reservas a última hora, un fenómeno que cada vez va a más. La meteorología es uno de los factores que influencia. El mes de abril empezó siendo uno de los más gélidos de los últimos 50 años y, ante la imprevisibilidad climatológica, muchos esperan al último momento para decidir si van a la costa a pasar la Semana Santa. El perfil de turistas de la Costa Brava es eminentemente nacional, con los franceses encabezando el ranking de visitantes internacionales. También se detecta una reactivación de los turistas británicos, aunque se espera que sus visitas se concentren sobre todo durante los meses de verano.
Por otra parte, en las comarcas de Lleida, el presidente de la Federación de Hostelería de la demarcación, Josep Castellarnau, también ha cifrado en un 60% la ocupación que hay en la zona actualmente, pero estima que este dato podría incrementar hasta el 90 o 95% durante el puente de Semana Santa. En el Pirineu, el perfil de turistas de esta campaña responde básicamente a familias catalanas. De todos modos, en este caso no se muestran tan seguros sobre la posibilidad de que la ocupación de este año pueda superar a la del 2019.
En el caso de Barcelona, el Gremi d'Hotels ha indicado que la ciudad ya dispone del 83% de los establecimientos hoteleros abiertos y auguran una ocupación del 80%. En los apartamentos turísticos, la ocupación puede llegar al 92%, según Apartur. Con respecto a Tarragona, Xavier Guardià, portavoz de la Federació d'Hostaleria i Turisme de la provincia, ha explicado a EFE que tienen en funcionamiento el 80% de los hoteles y que todos los campings y apartamentos turísticos están abiertos. La ocupación oscilará entre el 70 y 80%, un dato que valoran muy positivamente desde la entidad. Guardià espera la recuperación de mercados como el británico y el irlandés en la Costa Daurada. Finalmente, en relación con el turismo rural, lo cierto es que acostumbra a ser uno de los destinos estrella por Semana Santa. La Confederació del Turisme Rural i Agroturisme de Catalunya prevé que se llegue a una ocupación entre el 90 y el 100%.