El pasado miércoles se vivieron unos momentos de tensión en l'Hospitalet de l'Infant después de que el vigilante de una atracción de inflables de la zona alertara de la presencia de un cocodrilo de 1,5 metros en la playa del Arenal. Esta alerta obligó a los cuerpos de seguridad a mantener cerrada la playa desde las 7:00 hasta las 10:30 horas con el fin de intentar encontrar el reptil, que finalmente, no se consiguió detectar. La llamada del trabajador a su jefe activó un gran protocolo de seguridad con colaboración del equipo de socorristas, Agents Rurals, Seprona y Mossos d'Esquadra. La imagen que consiguió al vigilante ha sido analizada por los Agents Rurals, que han determinado que se trataba de una pastinaca, es decir, una "raya" común, que es habitual en los mares Mediterráneo y Atlántico, según adelanta El Diari de Tarragona.

Protocolo de seguridad

Aunque la playa se mantuvo cerrada durante casi 4 horas, los Agentes Rurales han valorado positivamente el protocolo de seguridad que se activó, y que hizo poner la bandera roja en la playa y prohibir el baño y el acceso a los bañistas. La presencia de la raya cerca de la playa y su movimiento rápido para volver al mar generó confusión, pero según ha explicado el gerente de AquaGames —parque acuático flotante— Xavier Mangrané, "es cierto que el vigilante avisó un animal de que salía del agua. De hecho, pensó que era una tortuga que iba a desovar cuando se encontró la sorpresa". Y ha explicado que "fuera o no un cocodrilo, la posible presencia de un animal en el agua y con los primeros bañistas llegando a L'Arenal, no podíamos correr riesgos".

Un caimán en el Besòs

El verano ha sido marcado por varios capítulos con reptiles. El pasado mes de julio el Cuerpo de Agents Rurals capturaron un caimán (‘Caimán Crocodylus’) en el río Besòs a su paso por Santa Coloma de Gramenet. Los agentes lo interceptaron después de recibir el aviso de un ciudadano que afirmaba que lo había visto nadar tranquilamente. Inmediatamente, se organizó un operativo conjunto entre la Policía Local de Santa Coloma de Gramenet, la Guardia Urbana de Barcelona, los Agents Rurals y el ADF (Agrupacions de Defensa Forestal) para encontrar el animal y sacarlo del río.

En aquella ocasión, se trataba de un ejemplar joven que se trasladó al  Centro de Recuperación de Anfibios y Reptiles de Cataluña (CRARC), en Masquefa (Anoia). Los Agentes Rurales apuntaban que es el tercer caimán que capturan en la historia del cuerpo. El primero fue el 2006 al pantano de Can Borrell de Collserola, y el segundo también fue capturado al Besòs a Santa Coloma. Aquel ejemplar, pillado el 2007, mesuraba 70 centímetros.