Durante un año, los especialistas de la lucha antiterrorista de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional han ido detrás de Said, un joven marroquí de 25 años que había conseguido una gran notoriedad en TikTok, donde acumula casi 400.000 seguidores y casi 4 millones de 'likes' por los mensajes que grababa y publicaba en los que hacía propaganda yihadista. Los últimos días, a raíz de la escalada de tensión que se ha originado después del ataque terrorista a gran escala por parte de Hamás contra Israel, la policía había detectado que había incrementado su actividad y que incluso se había propuesto pasar a la acción y estaba buscando cómo conseguir armas blancas y también chalecos antibalas.
El hombre, que tiene antecedentes por delitos comunes, vivía en un piso en la avenida Abad Marcet de la cocapital del Vallès Occidental (Barcelona), y hasta allí fue la policía para detenerlo, la tarde de este miércoles. Se instaló aquí después de volver a España. Aunque es nacido en Marruecos, y estuvo en Catalunya un tiempo, se marchó y estuvo en un par de ciudades europeas, y ahora hace casi un año volvió a la zona de Barcelona y se instaló en este piso de Terrassa.
Cada vez más radical y con más seguimiento en TikTok
Los mensajes que publicaba en TikTok —y también los mensajes en redes más restringidas— cada vez eran más claros y se había convertido en un peligro para la seguridad. Agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) y agentes de paisano de Información estuvieron durante horas en casa del joven, que finalmente fue trasladado a la Audiencia Nacional, que este viernes a primera hora de la tarde ordenó que ingresara en prisión por su relación con el terrorismo, la propaganda y delitos de odio.
El detenido tiene la nacionalidad marroquí y también estaba bajo la lupa de las autoridades del país norteafricano. En sus mensajes publicados en TikTok, además de pedir hacer la guerra santa por el Islam, asegurar que incluso mataría sus padres o hermanos si no fueran buenos musulmanes, y proferir insultos antisemitas y contra los homosexuales, también cargaba contra el rey Mohamed VI, el rey de Marruecos, por su supuesta colaboración con Israel. Said asegura en sus mensajes que el rey es judío y que todo lo que pasa en Gaza también es culpa suya. En los mensajes evitaba mostrarse próximo a ningún grupo terrorista concreto, reclamaba luchar por el Islam y recordaba que había que recuperar al-Ándalus y también celebraba el atentado terrorista que acabó con la vida del religioso Diego Valencia en Algeciras el pasado mes de enero, perpetrado por otro joven marroquí, que también pudo ser detenido e ingresó en prisión.
Quería pasar a la acción, según la policía
Los mensajes que publicaba en TikTok, algunas veces desde la calle o desde estaciones del metro, los hacía en árabe, hecho que generó que muchas personas conocedoras de este idioma informaran a las autoridades de que se estaban haciendo mensajes muy duros y que defendía la guerra santa. La policía ya hacía tiempo que lo vigilaba y lo tenía monitoreado, a él y a su mensaje radical. La radicalización iba a más y la Policía Nacional temía que el hombre, como decía, pasara a la acción. Ya tenía en su poder uniformes militares y estaba buscando más armas blancas y un chaleco antibalas para llevar a cabo un ataque terrorista. La explotación de la investigación se precipitó por este miedo de ataque inminente.
La semana pasada la Policía Nacional detuvo en Cubelles, en el Garraf, a una pareja, los dos españoles y conversos, por también difundir propaganda y tener manuales de fabricación de explosivos.