La plaga de cucarachas que está afectando el Centro de Urgencias de Asistencia Primaria (CUAP) de Santa Coloma de Gramenet ha provocado un gran revuelo. Después de hacerse pública la situación que se está viviendo en este centro hospitalario, el ayuntamiento sostiene que se enteró de la plaga el 6 de abril y que "inmediatamente" contactó con el Institut Català de la Salut (ICS) para eliminar las cucarachas, aparte ha pedido, el Departament de Salut que tome "las medidas necesarias" para controlar la plaga y "restablecer un entorno laboral adecuado". A pesar de la indignación por parte de los trabajadores del CUAP y de diferentes formaciones políticas, Salut y el ICS no tienen previsto fumigar el CUAP con el fin de poner fin a la plaga. La intención es hacer las mismas acciones que funcionaron en el 2022, que ayudan a controlar la plaga, y que han hecho durante la Semana Santa y que alegan que han supuesto "una reducción significativa de la plaga".
Trampas para atrapar las cucarachas
Tanto para la plaga de 2022 como la de 2023, Salut ha hecho una serie de medidas físicas, como la colocación de trampas adhesivas en diferentes espacios, el sellado de maderas, o mejorar la instalación de saneamiento o la retirada parcial o renovación del falso techo, como la de tratamientos químicos colocando un gel en diferentes puntos. Según explica La Vanguardia, este jueves operarios de una empresa de control de plagas se presentó al servicio de radiología, en la primera planta, que es el espacio donde se han encontrado el volumen mayor de cucarachas para volver a poner trampas adhesivas. Aparte, también abrieron los registros de los bajantes para instalar veneno, una sustancia que también pusieron en el alcantarillado. Los trabajadores aseguran que hace más de un año y medio que conviven con esta situación, y afirman que en una sola mañana han llegado a matar 80 insectos, y, por lo tanto, consideran que las medidas son muy conservadoras.
Salut ya advirtió a los trabajadores que las medidas tardarán a realizarse. Y es que hay que elaborar un proyecto, que después tiene que ser aprobado, para más tarde licitarlo, y finalmente, adjudicarlo. Los trabajadores advierten que el principal problema es que tendrán que esperar un tiempo indefinido para que se hagan las actuaciones, y, por lo tanto, ya temen que no se acabará resolviendo el problema. Según explica La Vanguardia, responsables de la Unidad de Salut Laboral del Barcelonès Nord de l'ICS han podido hablar con la alcaldesa de Santa Coloma, Núria Parlon, y se los aseguró que el consistorio se activaba para saber las soluciones que planteaba Salut a corto plazo, mientras el proyecto de obras no se lleva a cabo. De momento, el ayuntamiento ha manifestado que ha hecho un tratamiento de desinfección en las calles del entorno del CUAP y dice que lo mantendrá periódicamente.