El Consell Comarcal del Garraf ha penalizado con las máximas sanciones posibles en las empresas de monitores y transporte que a mediados de septiembre se olvidaron una niña de 3 años en el autobús de la escuela Maria Ossó de Sitges. La sanción a la compañía responsable del acompañamiento de los niños, la Fundación Pere Tarrés, es de 8.251 euros, para la empresa de transporte Plana, la multa es de 1.262 euros. El Consejo Comarcal ha detallado que se trata del 5% de los contratos de los servicios. En este sentido, ha precisado que la monitorización está licitada para 13 líneas y que el transporte se adjudica ruta a ruta, hecho que explica la diferencia de importes. "En los dos casos estamos ante una infracción muy grave", ha recalcado a la presidenta del ente, Mònica Gallardo.
7 horas cerrada a un autobús
Los hechos se produjeron el pasado 19 de septiembre cuando el bus escolar recogió a la niña, de 3 años, para llevarla hasta la escuela a Maria Ossó a las 9:00 horas, pero la niña finalmente no bajó del bus. El conductor del vehículo aparcó en las cocheras, situadas en las afueras de Vilanova i la Geltrú, y no fue hasta las 16:00 horas, que otro conductor cogió el mismo vehículo para hacer la ruta de recogida de los niños y se encontró a la niña, que había estado siete horas cerrada al autobús.
El gobierno comarcal, responsable del servicio de bus de las escuelas públicas del Garraf, ha vuelto a lamentar los hechos en rueda de prensa este viernes. Después de un mes y medio de investigaciones internas, ayer el ejecutivo aprobó un expediente de penalización contractual en las empresas de monitores y transporte. La presidenta del Consejo ha dicho que han optado por aplicarles la máxima sanción "con la voluntad de actuar de forma ejemplificante para evitar que se vuelva a repetir el descuido de ningún niño". Gallardo ha detallado que el ente tenía la opción de rescindir los dos contratos, pero ha precisado que hacer una nueva licitación implicaría un proceso administrativo "lento y complejo" en el cual las dos compañías tendrían que seguir prestando el servicio hasta una nueva adjudicación. "Y también se tendría que subrogar el personal", ha añadido, motivo por el cual ha justificado haber optado por "trabajar en positivo y garantizar que de ahora en adelante no haya más déficits ni problemas".
Asunción de responsabilidades
La presidenta comarcal ha indicado que tanto la Fundación Pere Tarrés como la empresa de transportes Plana han mostrado "asunción de responsabilidades" durante toda la investigación y han expresado "una voluntad de formar parte de la mejora del servicio". En este sentido, también ha agradecido a la dirección de la escuela y a la Asociación de Familias de Alumnos (AFA) la predisposición para resolver el caso. Con respecto a la diferencia de los importes de las sanciones, Gallardo ha insistido en que es consecuencia de los contratos que las dos empresas tienen con el Consejo Comarcal. La presidenta ha recordado que la licitación de la monitorización engloba las 13 líneas escolares que se prestan este curso, con un contrato que supera los 165.000 euros, mientras que el transporte se licita línea a línea. En el caso de la ruta donde estuvo el descuido de la alumna, el contrato es de más de 25.200 euros.
La penalización para ambas empresas ha sido del 5% de sus contratos, según ha indicado Gallardo. Aparte, ha instado a las empresas a presentar alegaciones si discrepan de los importes. Aunque la presidenta ha apuntado que "en primera instancia" la responsabilidad del descuido fue de los monitores, también ha precisado que la responsabilidad global de los hechos es de las dos compañías porque asegura que el chófer tendría que haber inspeccionado todo el autocar antes de cerrarlo en la cochera.
Reproches al Departament d'Educació
El gobierno comarcal también ha cargado contra el Departament d'Educació porque todavía no han dado respuesta a las peticiones para hacer una reunión sobre este caso. Gallardo ha asegurado que el Consejo Comarcal del Garraf "habría deseado sentirse más acompañado" por parte de la Generalitat, y ha lamentado que el ente ha tenido que asumir con recursos propios el acompañamiento psicológico a la niña que fue olvidada. También se ha hecho cargo de un servicio de transporte alternativo, "que la familia está utilizando puntualmente". En relación con los protocolos de actuación, la consellera comarcal de Educación, Gisela Vargas, ha garantizado que hace varias semanas que se han aplicado mejoras a todas las líneas para evitar que vuelvan a pasar los hechos de mediados de septiembre. Entre otros, se han ampliado las utilidades de la app que las escuelas utilizan para comunicarse con las familias, de manera que se ha incorporado un apartado para el bus escolar para establecer una "comunicación directa" en todo aquello relacionado con este servicio.