El árbol más emblemático de Collserola está de aniversario. El Pi d'en Xandri de Sant Cugat del Vallès cumple 250 años este 2024. Coincidiendo con la efeméride, el Ayuntamiento de Sant Cugat, pide a la Generalitat que lo declare Árbol Monumental de Catalunya —desde hace unos años ya es Árbol de Interés Local y Comarcal—. El alcalde, Josep Maria Vallès, adelanta que ya existe un primer informe favorable que avala esta declaración. "Hemos pasado el primer filtro", se felicita. Vallès cree que la declaración llegará "por lo que representa para los santcugatenses, por la resistencia, la perseverancia y el respeto por el medio ambiente". Con todo, el consistorio ha organizado un programa de actos para celebrar el aniversario del pino, que se prolongarán hasta el mes de octubre.
El ataque de 1997
El Pi d'En Xandri se plantó en 1774 para marcar los límites de las tierras de una estirpe del municipio y más recientemente ha sido símbolo de la lucha por la preservación del entorno natural de Torre Negra. Este simbolismo tomó una dimensión especial a partir de 1997, cuando fue víctima de un ataque. La madrugada del 2 de febrero de aquel año, alguien intentó, sin éxito, talarlo y quemarlo, pero le dejó unas graves heridas de las que todavía se recupera. Es un 'crimen' que nunca se pudo resolver, pero que desde entonces ha erigido el pino en un icono del municipio.
El pino vive desde aquel momento apuntalado y técnicos forestales lo revisan anualmente para evaluar su estado. Quien fue jefe del Servei de Parcs i Jardins del Ayuntamiento en el momento del ataque al pino, Jordi Torrijos, asegura que la evolución es "positiva". En aquel momento, además de los puntales se hicieron también operaciones de bionutrición para que el árbol regenerara los tejidos de manera natural y consiguiera cerrar las heridas: "El árbol está creando tejido de cierre y de cicatrización, pero todavía tardará para acabar de cicatrizar completamente".
Un pino, explica, funciona "como un submarino" y cuando existe una herida "crea unas barreras naturales de compartimentalización" para aislar la zona crítica y poder seguir creciendo. Con todo, Torrijos augura que "hay pino para unos cuantos años más" y explica que pueden llegar a vivir unos 400 o 450 años.
Más retos para el Pi d'en Xandri
Actualmente, más allá de la recuperación de las heridas de 1997, el Pi d'en Xandri tiene que hacer frente también al reto de la sequía. Torrijos avisa de que hay que tomar "medidas de mantenimiento" como el vertido de corteza triturada en la base para "mantener la humedad y favorecer la biodiversidad". El técnico también apunta la necesidad de implementar "trabajos de riego", con hoyos de agua en la proyección de la copa en el suelo para lograr humedecer el subsuelo ante la falta de lluvias. "Han sido años de sequía y las agujas del pino han crecido poquito", alerta.
Avui el Pi d'en Xandri tiene unos 23 metros de alto y 3,20 metros de diámetro de tronco. Su copa hace unos 21 metros de ancho y tiene una forma peculiar, con una rama díscola que quedó aislada del resto después de la nevada de 1962, cuando el árbol perdió parte de su ramaje por el peso de la nieve. Para conmemorar su 250.º aniversario, se organizarán diferente actos a lo largo del año, y el que ha servido para dar el pistoletazo de salida ha contado con la participación de alumnos de la Escola Pi d'en Xandri, que han hecho una jornada de campo con los técnicos en la propia explanada del pino.