A finales de 2025, Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) asumirá la gestión del actual RL3 Lleida-Cervera, del sistema Rodalies Lleida y operada por Renfe. Para poder asumir este cambio y, además, alargarlo hasta Manresa, la empresa Stadler ya trabaja en la construcción de cuatro trenes, con el fin de ofrecer, cuando estos estén operativos, 12 circulaciones diarias por sentido entre Lleida y Cervera, cinco de los cuales circularán hasta Manresa. En el marco de la feria Tomorrow Mobility y junto con los nuevos trenes de FGC para la línea Barcelona-Aeroporto del Prat, este miércoles se ha dado a conocer como serán estos nuevos convoyes.
Los nuevos trenes eléctricos, formados por tres coches, tendrán seis puertas a cada lado (12 en total), 164 asientos (140 fijos y 24 abatibles) y una capacidad total de 439 viajeros. Aparte de los indicadores sonoros de apertura y cierre de puertas, los trenes tendrán un sistema de alumbrado verde (apertura) o rojo (cierre) para facilitar la identificación de la maniobra por parte de las personas con discapacidad auditiva. En cada tren habrá 15 pantallas panorámicas de información al cliente (cinco en cada coche). Además, el sistema de información al viajero contará con 16 altavoces en cada coche. Para informar a los pasajeros de los andenes, los trenes dispondrán de ocho pantallas LED exteriores, dos de las cuales frontales (ubicadas en la parte superior de cada cabina) y seis laterales.
Los trenes serán accesibles, sin escaleras de acceso desde el andén y con rampa automática en las puertas próximas a la zona de movilidad reducida. El paso interior entre coches está permitido mediante pasillos de intercomunicación, con una ligera rampa, sin peldaños. Cada tren dispondrá de dos espacios reservados para personas con movilidad reducida, así como dos espacios multifuncionales para bicicletas, cochecitos, etc. La zona reservada para personas con movilidad reducida estará ubicada en el coche intermedio y dispondrá de un pulsador para solicitar parada. El coche intermedio, además, dispondrá de un sistema de asistencia para los usuarios con audífonos para comunicar transmisiones de servicio y anuncios de emergencia. El lavabo del tren, adaptado a personas con movilidad reducida, tendrá puerta de accionamiento eléctrico.
La construcción de los nuevos trenes, ya en curso, va a cargo de la empresa Stadler, y la entrega del primer tren para iniciar el periodo de pruebas está prevista para el segundo trimestre de 2025. El contrato adjudicado a Stadler incluye el mantenimiento de los cuatro trenes eléctricos por un periodo de 15 años. El suministro de las cuatro nuevas unidades tiene un coste de 44 millones de euros y el mantenimiento, de 21,2 millones.