"Puedo decir categóricamente que en las escuelas catalanas no hay adoctrinamiento". Así de claro y contundente ha sido el síndic de greuges, Rafel Ribó, en la presentación del informe El pluralismo en las escuelas de Catalunya como garantía del no adoctrinamiento, un estudio de más de 160 páginas que se ha presentado esta mañana. Según Ribó, el informe "es concluyente" porque "más allá de situación puntuales que se tienen que corregir", en ningún caso se puede desprender un "adoctrinamiento sistemático" del alumnado.
De las 174 incidencias que han llegado al síndic a raíz de los hechos del 1-O, solo en 10 se ha detectado alguna irregularidad. Es el caso de una escuela "donde se hizo un comunicado de huelga y se invitó a participar a las manifestaciones" o el caso de otro centro donde "a la hora del patio se hizo una actividad voluntaria de simular una votación", ha ejemplarizado el síndic.
Rafel Ribó ha remarcado que se trata de una cifra muy baja si tenemos en cuenta que en Catalunya hay 4.800 centros educativos, 115.000 profesores y 1.300.000 alumnos.
Ribó también ha señalado que un 21,3% de las incidencias denunciadas no han podido ser verificadas porque "forman parte de escritos formulados por anónimos" o porque hacen referencia a actos y lugares sin especificar.
Los libros de texto tampoco adoctrinan
El informe del síndic también ha prestado especial atención a los libros de texto basándose en el informe de la entidad AMES (Acción para la Mejora de la Enseñanza Secundaria) sobre el adoctrinamiento a través de los libros de quinto y sexto de primaria. El estudio, que ha analizado 3.296 páginas, concluye que "no se puede señalar voluntad didáctica de adoctrinamiento". "Se puede hablar de mayor o menor atención a tal o a cual materia, pero no de adoctrinamiento", ha señalado el síndic de greuges. O sea, que hay libros que dedican más extensión a hablar de la historia de Catalunya, mientras que otros lo hacen de España. Rafel Ribó ha detectado alguna "imprecisión puntual", pero "más ocasionada por la voluntad de hacer comprensible la información" que por adoctrinar.
El síndic también ha querido de dejar claro que no se tiene que confundir el uso del catalán como lengua vehicular con el adoctrinamiento, y ha hecho un llamamiento a los agentes públicos y sociales y a los medios de comunicación para que trate a la escuela con "rigor" y "responsabilidad", con el objetivo de garantizar la convivencia de la escuela.
El informe se presentará la semana que viene en el Parlament de Catalunya.