Después de las enfermeras, los profesores. En medio de la huelga organizada por las enfermeras contra el nuevo convenio negociado por la Generalitat, los sindicatos educativos se han organizado este miércoles para exigir al Gobierno la reversión de los recortes que se arrastran desde 2010, una demanda histórica que todavía no se ha cumplido. Además de reunirse con la Conselleria de Educación para negociar la mejora de las condiciones laborales, los sindicatos con presencia en la mesa sectorial —USTEC, Professors de Secundària, CCOO, CGT, Intersindical, UGT y EUSOC— han convocado concentraciones y encarteladas en los servicios territoriales y en los centros educativos "como medida de presión".
La problemática gira en torno a la negociación para conseguir que se acaben de revertir los recortes después de la última gran crisis económica. En una conversación con ElNacional.cat, la portavoz de USTEC, Iolanda Segura, ha explicado que esta es una demanda "irrenunciable" y que se tiene que resolver "ya". Los sindicatos sitúan como una línea roja el reconocimiento de la deuda generada por los primeros sexenios que se cobraron a los nueve años de antigüedad y no a los seis. Las organizaciones laborales calculan que en torno al 30% de la plantilla podría estar arrastrando este retraso por la modificación que se hizo en 2012 a raíz de los recortes y alertan de la pérdida de poder adquisitivo que implica. Según los sindicatos, el Departamento está de acuerdo en volver a poner el contador a los seis años, pero no con el reconocimiento de la deuda generada desde entonces, y que tendría un coste de "más de 150 millones de euros".
También hay dos puntos más sobre la mesa. Por una parte, los sindicatos exigen la calendarización de la reducción de dos horas lectivas a los mayores de 55 años, una medida que ya existía para rebajar la "sobrecarga" de trabajo pero que después se convirtió en horas complementarias. Las organizaciones sindicales consideran que es más fácil que aquí puedan acercar posiciones, aunque todavía haya aspectos para "pulir", han señalado. Por otra parte, los sindicatos también quieren conseguir la equiparación salarial del profesorado técnico de Formación Profesional que no tiene titulación universitaria, una cuestión con la cual también consideran que se llegará a un acuerdo pronto.
Las negociaciones, "en punto muerto"
Ahora bien, a pesar del optimismo que quieren retener las organizaciones —a principios de año consiguieron acercar posiciones con el exconseller Josep Gonzàlez-Cambray antes de la llegada de Anna Simó, con quien se ha tenido que empezar a negociar de nuevo—, estas consideran que las negociaciones con el Departamento de Educación para mejorar las condiciones laborales "continúan en punto muerto". Así lo ha afirmado Iolanda Segura a la salida de la reunión de la Mesa sectorial de este miércoles. Las organizaciones reprochan a la Conselleria "inmovilismo" en las negociaciones y, en este sentido, destacan que no hay "ningún avance" en el reconocimiento de la deuda de los sexenios. Los sindicatos entregarán una contrapropuesta de cara a una nueva reunión, prevista para el jueves 21 de diciembre.