Sor Lucía Caram ha denunciado que ha sido víctima de una agresión "física y verbal" por parte del sacerdote español Julio Romero Fernández, actual delegado episcopal de Cáritas en Cartagena-Murcia, cerca de la plaza de San Pedro, en el Vaticano. Según cuentan en Religión Digital, el cura se dirigió a Lucía Caram y afirmó: "El Papa y usted acabarán en el mismo sitio, en el infierno". El digital explica que la agresión se produjo hacia las 12:30 horas, cuando el sacerdote, acompañado de otra persona, salía de una tienda de objetos litúrgicos, cuando al encontrarse con la monja, la instó a "ser más prudente". Sor Lucía se acercó a él y le soltó que, como decía el papa Francisco, "el infierno está lleno de prudentes", y que había que ser más valientes. Fue en ese momento cuando el sacerdote le dijo que ambos acabarían en el infierno. Sor Lucía Caram iba acompañada de parte del equipo de la Fundación Santa Clara en Borgo Pio cuando se produjo el incidente. La denuncia ha sido compartida, entre otros, por el miembro de la Comisión Pontificia antiabusos Juan Carlos Cruz. En los vídeos compartidos en las redes se puede ver cómo Julio Romero increpa a la monja y, posteriormente, le da un golpe al móvil mientras ella lo está grabando.
Actitud violenta
Tras ser increpada, y cuando Sor Lucía Caram se iba, él se dirigió en un tono amenazador y le advirtió de que "en España yo le enseñaría lo que vale un peine", según relatan varios testimonios. Justo en ese momento, la monja decidió grabar al sacerdote, que acabó huyendo hasta que se giró y golpeó el móvil. "Sí, si encima es del Barça", añadió. Intentó pegarle, cogió a una de las chicas que iban con el grupo, y uno de sus acompañantes la obligaron a borrar lo que había en el teléfono. A Lucía le pegó un manotazo para intentar tirarle el móvil", apunta Religión Digital.
Sor Lucía Caram se lamentó y le respondió: "Estáis alejando a la gente de la Iglesia", mientras que él le contestó que "yo haré lo que tenga que hacer". Poco después, en otro vídeo, se podía ver al cura menos nervioso, y trataba de justificarse asegurando que "únicamente le he dicho que tenía que ser más prudente". Precisamente en ese momento la monja lo advierte de que denunciará esta situación ante la Conferencia Episcopal, y el sacerdote asegura que "es mentira, la que ha querido tocarme ha sido usted".
En una publicación en su cuenta de X, Sor Lucía Caram ha calificado al delegado de Cáritas de persona agresiva, pero ha advertido que "no tengo miedo. A Francisco no se lo toca".