La casa de subastas suiza Bonhams pone a la venta un lote de 25 coches de lujo excepcionales, decomisados a Teodoro Nguema Obiang, Teodorín, hijo del dictador de Guinea Ecuatorial, Obiang Nguema Mbasogo, y candidato a su sucesión. Uno de ellos, el Lamborghini Veneno Roadster, podría valer 4,5 millones de dólares. Otro, el Koenigsegg One, 2 millones, y un tercero, el McLaren P1, "sólo" 1,5. La colección será exhibida el 27 y 28 de septiembre en el Bonmont Golf & Country Club, cerca de Ginebra, y el 29 se procederá a la subasta.
Teodorín comprándose un coche de lujo. Instagram @teddynguema.
Un parque automovilístico para una persona
Teodorín está habituado a un altísimo tren de vida. Es famoso por hacer compras extravagantes, por gastar sin límite y por pedir bienes exclusivos. Del Lamborghini Veneno Roadster sólo se hicieron 9 unitats; del Koenigsegg One se hicieron 6 o 7 (según las fuentes)... En Guinea Ecuatorial todo el mundo conoce la afición de Teodorín por los coches lujosos (y los aviones lujosos, las bebidas caras, los viajes suntuosos y las compañías sexuales sofisticadas...). En realidad, los 25 autos interceptados por la justicia suiza sólo son una parte de sus bienes depositados en Europa. También tenía coches lujosos en París, en Estados Unidos y, obviamente, en Guinea... incluso contaba con una sofisticada imitación del Batmóvil, que alguien destruyó al chocar en las calles de Malabo. Puede parecer excesivo que una sola persona tenga decenas de coches de lujo, pero Teodorín tiene varios yates, numerosas mansiones y un submarino de bolsillo. En realidad, ha tenido dos de los exclusivos Bugatti Veyron: el primero le fue incautado por la justicia francesa, en 2012, cuando sólo había hecho con él 1.209 Km (sería subastado por casi un millón de euros). Algunos de los 11 vehículos que fueron tomados con el Bugatti habían circulado tan poco como este. El Maserati MC 12 del 730.000 euros llevaba circulados 2.328 Km, y el Ferrari 599 GTO, de "sólo" 275.000 euros, llevaba 597 Km.
Teodorín en su avión privado. Foto: Instagram @teddynguema.
Los bienes mal adquiridos
Once de estos vehículos, entre ellos el Koenigsegg One, fueron incautados en el aeropuerto de Ginebra en 2016, cuando Teodorín intentaba llevárselos en avión del país para evitar que fueran interceptados por las autoridades judiciales helvéticas. La justicia suiza inició las investigaciones contra Teodorín a instancias de la justicia francesa, que trataba de aclarar su posición dentro del sumario llamado "de los bienes mal adquiridos", que afectaba a tres dictadores de África Central (Obiang de Guinea Ecuatorial, Sassou Nguesso de Congo y Omar Bongo de Gabón). En febrero de 2019 Guinea Ecuatorial aceptó pagar 1,3 millones de dólares en costas procesales y dejar los bienes en manos de la justicia suiza para evitar un posible ingreso de Teodorín en prisión. Los beneficios de la subasta se tendrían que destinar a finalidades sociales en Guinea Ecuatorial.
Teodorín con su minisubmarino. Foto: Instangram @teddynguema.
Sangría constante
A Teodorín también se le embargó un gran yate, el Ebony Shine, valorado en 100 millones de dólares, en Holanda. Ha tenido procesos en muchos países (recientemente se le incautaron unos relojes de lujo, valorados en millones de dólares, en el aeropuerto de Viracopos, en Brasil). En Estados Unidos tuvo que renunciar, mediante un acuerdo judicial, a su lujosa mansión de Malibú y a los bienes depositados allí (entre los cuales el mítico guante usado por Michael Jackson en la grabación del videoclip de Thriller). Los bienes norteamericanos ya fueron subastados y Estados Unidos busca la forma de destinar los ingresos generados al bienestar de la población de la Guinea Ecuatorial. El gobierno del país no se lo pone fácil, ya que obstaculiza el trabajo de ONG independientes, y desvía sistemáticamente todos los bienes que llegan a las cuentas del Estado. Y, mientras tanto, Teodorín no deja de comprar más bienes de lujo.
Teodorín en su casa de Bata. Foto: Instagram @teddynguema.
Un país que no avanza
Guinea Ecuatorial es un país que tiene un PIB muy alto, de 19.513 $ por habitante, gracias a la cuantiosa producción petrolera y a la escasa población (alrededor de un millón de habitantes). Pero el Índice de Desarrollo Humano guineano es extremadamente bajo: se sitúa en la posición 141 (de 189) a nivel mundial, por debajo de países en situación muy difícil, como Honduras, o incluso por debajo de países africanos sin petróleo como Ghana, Namibia o Cabo Verde. La esperanza de vida al nacer, actualmente, se sitúa en 57,9 años, y la media de años de escolarización se sitúa en sólo 5,5. Es uno de los países del mundo donde hay más desnivel entre el PIB y el IDH. Desde el 2012 Teodorín es vicepresidente del país, aunque no se sabe qué nivel de estudios tiene. A pesar de ocupar este cargo, pasa largas temporadas fuera de Guinea, viajando por todo el mundo.