Después de que el pasado miércoles un grupo de 2.000 personas tratara de acceder a la ciudad de Melilla saltando la valla que recorre su frontera, esta mandada un nuevo grupo lo ha vuelto a probar. En esta ocasión ha sido un grupo menor, de unas mil personas, que continúan con su esfuerzo de acceder a España desde primeras horas de la mañana hasta horas de ahora. Según Efe, unos 300 migrantes habrían conseguido entrar en la ciudad norteafricana.
La Comandancia de la Guardia Civil ha observado a las 6 de la mañana de este jueves un numeroso grupo de migrantes que se aproximaban a la valla, por lo cual se ha activado el llamado dispositivo antiintrusión. Hacia las 07:25 horas, después superar los efectivos de las fuerzas de seguridad marroquíes, las personas que es dirigente en la valla han llegado y han empezado a intentar saltarla, informa Europa Press. En este momento han intervenido dispositivos de la Guardia Civil y la Policía Nacional, de forma similar a lo que va sucede ayer, pero con un grupo de poco más de un millar de personas.
Las fuerzas de seguridad españolas requisan los utensilios utilizados para tratar de saltar la valla de Melilla / Efe
El número de migrantes que han acabado pueden acceder en territorio español son aproximadamente un 300, de entre los cuales, unas cuantas decenas se habrían dirigido deprisa al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI). Según los testigos, la mayoría de las personas que han intentado o han conseguido saltar la valla provenían de países subsaharianos.
Preocupación en el Gobierno
Isabel Rodríguez, ministra portavoz del Gobierno, ha calificado de "preocupante y muy importante" la crisis migratoria en Melilla después de los dos saltos en días consecutivos en la valla, los más numerosos de los registrados hasta ahora. "Lo estamos siguiendo con mucha atención, es una situación preocupante y ayer, precisamente, el presidente del Gobierno hacía referencia a la Unión Europea para abordar la política migratoria porque somos la frontera sur de Europa", ha remarcado.
Pero la posición del Gobierno con respecto a los hechos de Melilla no se limita aquí. Según publica La Vanguardia, en el Ministerio del Interior hay voces que sostienen que no se trata de un intento de salto aislado, sino que detrás considera que hay "una clara intencionalidad" de Marruecos "para presionar España". Las sospechas nacen del hecho que, las autoridades marroquíes no informaron del avance de la columna de 2.500 personas que se dirigían a la valla, una peregrinación que duró un buen rato. "Es imposible que Marruecos no detecte una columna humana de 2.500 personas –con referencia a la que se formó ayer– a las cuales se mueve 15 kilómetros durante más de una hora", se lamenta desde el Ministerio.