La operación retorno de las vacaciones de verano quedará alterada por el gran número de vuelos y trenes que se han cancelado por las huelgas de este fin de semana. Por una parte, el personal de tierra de Iberia ha iniciado dos jornadas de paros en el aeropuerto del Prat que han obligado a la aerolínea a anular un total de 92 vuelos. Las cancelaciones se han repartido en 54 vuelos el viernes 30 de agosto y 38 el domingo 1 de septiembre.
Iberia ha asegurado que ha informado a los pasajeros afectados —unos 14.000 usuarios— y que les ha ofrecido la reubicación en otro vuelo adaptado a sus necesidades o el reembolso del vuelo. El handling de Iberia, que se encarga de la gestión de los equipajes de hasta 27 compañías en el Prat, protesta por la falta de estabilidad de la plantilla, el exceso de cargas de trabajo, las horas extraordinarias y la reorganización de turnos para conciliar la vida familiar y laboral.
Respecto a las dos últimas jornadas —viernes y domingo— de paradas parciales que la CGT ha llevado a cabo en Renfe este verano, ha forzado a la compañía ferroviaria a cancelar hasta 360 trenes. Esta huelga implica dos paradas diarias, de cuatro horas cada una, que tienen lugar entre las 12 y las 16 horas, y entre las 20 y las 24 horas. En este caso, los trabajadores piden un aumento de plantilla.
Además, este domingo se suma el primero de los diez días de la huelga de los tripulantes de cabina de Ryanair. No obstante, la compañía sólo ha cancelado seis vuelos con el fin de minimizar los efectos. Los trabajadores protestan por los cierres de las bases de Girona, Gran Canaria, Tenerife y Lanzarote.