Tragedia en El Hierro. Nueve personas han muerto y 48 están desaparecidas después de que el cayuco en que viajaban haya volcado esta madrugada, mientras se estaban haciendo las operaciones de salvamento. Un total de 90 personas iban a bordo de la embarcación, que ha viajado desde Mauritania hasta las Canarias. El naufragio, que se ha producido de noche y en unas condiciones climatológicas adversas, ha tenido lugar cuando varios ocupantes de la patera se han puesto de pie, hecho que ha provocado que la barca volcara. Entre los supervivientes, hay cuatro menores, según ha informado el delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana.

Pestana, en declaraciones a los medios de comunicación, ha relatado que el 112 recibió una llamada de auxilio a la una de la madrugada de una embarcación en que viajaban desde hacía seis días un total de 90 personas, procedentes de Nuadibú, en Mauritania, y hacía dos días que no comían ni bebían agua. En la alerta, informaron de que se les había parado el motor de la embarcación y que se encontraban a unos seis kilómetros de El Hierro. De esta manera se activaron inmediatamente los recursos de emergencia y una embarcación de Salvamento Marítimo acudió al rescate. El momento más crítico se produjo precisamente entonces, cuando muchos de los migrantes se desplazaron hacia una misma zona del cayuco, cosa que provocó que se volcara, tal como han relatado los supervivientes.

El delegado del Gobierno en Canarias ha alertado de que a partir del segundo día del naufragio pueden empezar a aparecer los cadáveres, por lo cual se mantendrán los medios desplegados en la isla. En caso de que aparezcan los cuerpos, se reforzará el servicio de autopsias en El Hierro e, incluso, se estudia la posibilidad que si apareciera un número "muy importante y sobrepasa los medios" se trasladarán en Tenerife. De momento, la Guardia Civil tiene previsto desplazar una carpa al muelle con capacidad de mantenimiento de cierta temperatura que pueda ayudar a las tareas de los forenses.

"Un milagro" haber salvado 27 vidas

Según Anselmo Pestana, es "casi un milagro" haber salvado 27 vidas, entre las cuales hay cuatro menores, ya que muchos de los migrantes no saben casi nadar y se encuentran en mal estado de salud después de pasar seis días en una embarcación precaria. Asimismo, ha señalado que todavía se desconoce si entre los desaparecidos hay menores. El Gobierno ha habilitado un espacio en el muelle de La Restinga y al puerto de La Restinga por si se recuperan más cuerpos.