El comisario David Boneta se incorporará a la dirección operativa de los Mossos d'Esquadra después de la marcha del número dos del cuerpo, Ferran López, que será jefe de seguridad del FC Barcelona, mientras que por primera vez una mujer, la comisaria Marta Fernández, comandará la policía en Barcelona.
Así lo han anunciado los Mossos d'Esquadra en un comunicado, después de que este miércoles haya trascendido que López, un comisario de la máxima confianza del major Josep Lluís Trapero, ha aceptado la oferta del presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, para incorporarse en los próximos días como nuevo responsable de seguridad del club blaugrana, después de 31 años en la policía catalana.
En una reestructuración obligada por la marcha de López, Trapero incorpora en la dirección operativa de los Mossos, el núcleo duro de la cúpula policial donde ya estaban los comisarios Miquel Esquius y Juan Carlos Molinero, al también comisario David Boneta.
A Boneta, que hasta ahora estaba al frente de la Comisaría Superior de Coordinación Territorial, lo sustituirá en este cargo el hasta ahora jefe de la región policial de Barcelona, Carles Anfruns.
Movimientos en cadena
El nuevo nombramiento de Anfruns ha propiciado un movimiento de fichas en el cual, por primera vez, una mujer, la comisaria Marta Fernández, asumirá el máximo mando de los Mossos d'Esquadra en la Región Policial de Barcelona.
A Fernández, que hasta ahora era la máxima responsable de la Comisaría General de Investigación Criminal, la sustituirá el intendente Antoni Rodríguez, que ya ocupaba el puesto de subjefe en esta comisaría.
En su comunicado, los Mossos d'Esquadra agradecen, con el major Trapero al frente, los años de servicio a la ciudadanía que ha prestado López desde diferentes ámbitos en el cuerpo autonómico, así como su "dedicación y lealtad" en la institución durante los 31 años en que ha llevado el uniforme de la policía catalana.
López, 31 años de servicio
El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, ha fichado como jefe de seguridad del club blaugrana a López, que dirigió la policía autonómica en la etapa del 155 y que actualmente volvía a ejercer como número 2 en la cúpula de Trapero.
López, que ingresó en la policía catalana en 1990 y con el tiempo se erigió en uno de los comisarios de la máxima confianza de Trapero, asumió la prefectura de los Mossos en octubre de 2017, después de la destitución del major, y estuvo al frente del cuerpo durante la etapa del 155, lo cual le valió varias críticas del independentismo.
De hecho, el comisario dimitió como jefe de los Mossos en junio de 2018, una vez Miquel Buch fue nombrado conseller de Interior, argumentando que había asumido el mando de forma "temporal y limitada".
Después de la absolución de Trapero y su restitución, el 12 de noviembre pasado, al frente de los Mossos d'Esquadra, el major volvió a situar como número dos del cuerpo a López, que se había mantenido en la cúpula en los breves mandatos de su sucesor, Miquel Esquius, así como en la etapa de Eduard Sallent como comisario jefe.