Mantener la casa limpia no solo crea un entorno más agradable y ordenado, sino que también ayuda a prevenir problemas de salud eliminando polvo, alergenos y bacterias. Además, una limpieza regular permite conservar en buen estado los muebles y electrodomésticos, evitando que la suciedad los deteriore con el tiempo.
Aun así, hay rincones que a menudo pasamos por alto cuando limpiamos: la parte posterior de los electrodomésticos, las juntas de las baldosas, los zócalos... y las manchas amarillas del inodoro. Estas últimas pueden parecer difíciles de eliminar, pero hay un truco muy sencillo que permite dejar el asiento del inodoro impecable en pocos minutos.
¿Por qué aparecen las manchas amarillas al inodoro?
Es habitual la creencia que las manchas amarillas en el asiento del inodoro son causadas por la suciedad, pero en realidad, en la mayoría de los casos, son depósitos de cal acumulados a causa del agua. Cuándo el agua se evapora, deja atrás minerales que acaban formando estas marcas de color amarillento. En otras situaciones, puede ser por el uso de productos químicos demasiado agresivos puede provocar decoloración y hacer que el plástico adopte esta tonalidad.
El truco definitivo para eliminar las manchas amarillas
Según los expertos, no hay que recurrir a productos químicos fuertes ni a limpiadores comerciales para eliminar estas manchas. El ingrediente clave para conseguirlo es el ácido cítrico, un componente natural presente en frutas como el limón, conocido por su gran capacidad para disolver la cal y eliminar suciedad incrustada.
Para aplicar este producto solo tienes que seguir los siguiente pasos:
- Calienta agua hasta que hierva y viértela en un recipiente resistente al calor.
- Deja que se enfríe ligeramente y añade ácido cítrico, removiendo hasta que se disuelva completamente.
- Aplica la solución sobre el asiento del inodoro con una esponja. Para llegar a las zonas más difíciles, utiliza un cepillo de dientes viejo.
- Deja actuar durante 10 minutos para que el ácido cítrico disuelva la cal y elimine las manchas.
- Pasado este tiempo, limpia la superficie con un trapo húmedo, rozando suavemente para evitar daños.
¿Cada cuánto se tiene que limpiar el inodoro?
Para evitar que las manchas amarillas vuelvan a aparecer, es recomendable limpiar el asiento del inodoro al menos una vez por semana. La humedad, los residuos de productos de limpieza y los depósitos minerales del agua pueden provocar nuevas acumulaciones con el tiempo.
Un truco adicional es utilizar productos suaves y no abrasivos, como vinagre blanco diluido en agua o detergentes específicos para baños. También es importante secar bien la superficie después de limpiarla para evitar la acumulación de humedad.
Con este sencillo método, el asiento del inodoro te quedará como nuevo y sin necesidad de utilizar productos químicos agresivos.