Los 28 han acordado después de horas de negociaciones y durante la madrugada de jueves a viernes un pacto migratorio de mínimos. Los líderes europeos han decidido el reparto voluntario de los inmigrantes rescatados en el mar y enviarlos a "centros controlados" que acogerán algunos estados.
El objetivo es que en estos centros de retención se distinga de forma "rápida y segura" entre los migrantes irregulares económicos, que serán devueltos, y aquellos que necesitan protección internacional, que serían repartidos entre los estados siempre de forma voluntaria de acuerdo con "el principio de solidaridad". "Así, todas las medidas pactadas, incluida la reubicación y el reasentamiento, serán de carácter voluntario", subraya el documento.
Un pacto de mínimos
Por otra parte, los jefes de estado y de gobierno no han dejado de lado la idea de construir campos para inmigrantes fuera de la UE como medida para "prevenir" los flujos migratorios irregulares en el Mediterráneo, eliminar los "incentivos" para embarcarse en viajes "peligrosos" y "romper" con las redes de tráfico de personas.
"El Consejo Europeo insta el Consejo y a la Comisión a explorar rápidamente el concepto de plataformas de desembarque regionales, en estrecha cooperación con los terceros países pertinentes y el ACNUR y l'OIM", añaden en las conclusiones. Matizan que estas plataformas o campos -un término, este último, que las instituciones rechazan- tienen que operar también distinguiendo las situaciones individuales. Es decir, diferenciando entre migrantes económicos y personas con derecho de asilo.
El pacto alcanzado sobre inmigración ha gustado sobre todo en Italia, que ha visto satisfechas sus demandas porque|para que otros estados miembros cumplan con el principio de "solidaridad" que Roma les exige, aunque sea voluntariamente.
"Italia ya no está sola. Quien llega a Italia, llega a Europa", ha dicho el primer ministro Giuseppe Conte en la salida de la reunión con sus homólogos de madrugada. La prioridad italiana, apuntaban jueves fuentes diplomáticas, era marcharse de la cumbre viernes con algún tipo de acuerdo sobre inmigración que pones de manifiesto que Italia no cargaba sola "el peso" de la gestión de las llegadas y la acogida de los solicitantes de asilo. De hecho, Italia amenazó el jueves de hacer fracasar la cumbre y no permitir ningún acuerdo en cabeza|cabo|jefe otro ámbito si no estaba la garantía de un acuerdo migratorio satisfactorio en sus ojos.
El apoyo|soporte al Estado español
En el texto aprobado también se recoge que con respecto a la ruta del Mediterráneo central, los esfuerzos por detener a los contrabandistas que operan desde Libia "se tienen que intensificar todavía más". Así, se subraya que la UE "seguirá dando apoyo en Italia" y en otros estados de primera línea en este sentido. E incluso se avisa que "todas las embarcaciones que operan en el Mediterráneo tendrán que respetar las leyes aplicables y obstruir las operaciones del guardacostas libio".
El texto también incluye una referencia explícita al estado español y fija que "a la luz del increement reciente de los flujos en el Mediterráneo occidental la UE dará apoyo, financieramente o no, a todos los esfuerzos de los estados miembros, especialmente España, y los países de origen y tráfico, en particular el Marruecos, para prevenir la inmigración ilegal".