Una avería que afecta al sistema de electrificación ha provocado la interrupción de la línea de Alta Velocidad Madrid-Barcelona. La avería se ha producido cerca de Calatayud (Zaragoza) y afecta a un tren de un operador ferroviario ajeno a Renfe, según ha informado a Europa Press la compañía. Ante esta incidencia, "completamente ajena a Renfe", la empresa ferroviaria está gestionando un servicio alternativo por carretera con el fin de garantizar la movilidad de los clientes afectados. Además, Renfe permite los cambios y anulaciones sin coste y mantiene su compromiso voluntario de puntualidad. La compañía ha destacado que técnicos de Adif y del operador ferroviario afectado están trabajando en la resolución de la incidencia.
En total han sido tres horas en que la conexión de tren de alta velocidad entre Barcelona y Madrid ha quedado totalmente interrumpida, a raíz del desprendimiento de una catenaria que ha atropellado un convoy de la compañía Ouigo. A las 18.24 h Adif ha comunicado que se ha podido poner en marcha el servicio de nuevo en una única vía. Técnicos de Adif confirmaron que se puede restablecer la circulación por una vía en el tramo Ariza - Alhama de Aragón. Una vez Ouigo realice el transbordo del tren que se encuentra detenido en el trayecto, se podrá ir recuperando progresivamente la circulación de trenes de alta velocidad en este tramo.
Esta no es la única incidencia que ha sufrido el AVE este mes de mayo. La circulación de trenes de alta velocidad entre Catalunya y Francia se interrumpió el martes 10 de este mes por el descarrilamiento de un convoy de mercancías en los alrededores de Perpinyà, según ha informado la compañía a Renfe. Los trenes entre Figueres y Barcelona, sin embargo, funcionaban con normalidad y la circulación en este tramo se garantizó. La operadora encargada del transporte de viajeros entre los dos costados de la frontera, Renfe-SNCF en Cooperación, gestionó un servicio alternativo por carretera entre Figueres Vilafant y Perpinyà.
Hay que recordar que este mes también ocurrió un fatídico accidente en las vías del tren de los Ferrocarriles de la Generalitat. Un vagón de tren de mercancías descarriló en Sant Boi e impactó contra un tren lleno de pasajeros. El conductor quedó fulminado, dos personas quedaron heridas y 83 personas resultaron afectadas. Las causas todavía se están investigando, de hecho, Ferrocarriles de la Generalitat de Catalunya desplazó un convoy para investigar el accidente. El presidente español, Pedro Sánchez llamó por teléfono el presidente Pere Aragonès para trasladarle su luto, colaboración y solidaridad después del accidente en Sant Boi. "Acabo de hablar con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, después del accidente en Sant Boi de Llobregat. Le he transmitido nuestro pesar y la máxima colaboración y solidaridad del Gobierno. Todo nuestro apoyo", ha dicho. El vicepresidente, Jordi Puigneró, se desplazó también al lugar de los hechos desde donde se anunció que Mossos y varias autoridades "analizarían que ha pasado" y que "ya se estaba trabajando por el restablecimiento del servicio".
La presidenta de FGC, Marta soberano, también atendió a los medios de comunicación y declaró que las personas afectadas fueron evacuadas y desplazadas. El tercer vagón del tren de mercancías se precipitó sobre el tren de transporte público en una curva que hay a la salida de la estación de Sant Boi en dirección Barcelona. Puigneró aseguró que los trenes "iban a muy baja velocidad" y, por lo tanto, se tendrá que aclarar los hechos. El presidente Pere Aragonès lamentó la muerte del maquinista en el accidente: "En nombre del Gobierno, quiero transmitir el pésame y todo el apoyo a su familia". También aseguró que sigue de cerca la evolución de "el importante número de heridos". El presidente español, Pedro Sánchez, quiso mostrar también preocupación por las noticias: "Mi más sentido pésame a la familia del maquinista muerto en el descarrilamiento. Todo mi apoyo y el deseo de una rápida recuperación de los numerosos heridos en el accidente"