El Hospital universitario Vall d'Hebron de Barcelona ha tenido que arrancar un plan de contingencia asistencial que reduce la actividad en quirófanos en las urgencias y los trasplantes, a causa de afectaciones generalizadas en el sistema de climatización, según han informado fuentes del centro. La avería de un compresor que se habría iniciado el martes por la mañana ha dejado sin aire acondicionado la zona de los quirófanos. El mayor centro sanitario de Catalunya seguirá realizando intervenciones de urgencia y trasplantes, pero se ha visto obligado a cancelar algunas intervenciones programadas no urgentes. En un correo dirigido a lo largo de esta semana a los trabajadores del centro, se detalla que los quirófanos han quedado reservados exclusivamente para "las actividades urgentes, emergentes y para los trasplantes hasta que se resuelva la incidencia".
En este mismo escrito, se pide "comprensión" a los profesionales de la casa. Desde el centro sanitario se ha acordado que la climatización no solo afecta a la temperatura, sino también al reciclaje del aire, por lo tanto, se ha aconsejado limitar la actividad en los quirófanos por seguridad. El Vall d'Hebron reconoció este miércoles los problemas en la ventilación, aunque no pudo precisar las zonas que quedaban afectabas, esta se convierte así en la segunda incidencia grave desde la primavera. El mes de junio de 2021, una avería también dejó sin climatización la UCI pediátrica. A pesar de estos problemas, el hospital confía en "una rápida solución" y admite que reforzará la climatización "para garantizar la normalidad el resto del verano".
Nuevo edificio de atención ambulatoria
Hace solo unas semanas, el hospital Vall d'Hebron presentó su futuro edificio, que prevé estrenar el año 2026 y contará con 10 plantas y 46.210 m dedicado a la atención ambulatoria, que se levantará en el otro lado de la Ronda de Dalt, justo delante del hospital general, donde estaba el helipuerto. El centro sanitario invertirá 70 millones de euros en este nuevo edificio, donde se concentrarán todos los servicios ambulatorios, excepto los pediátricos, y alojará 250 consultas, 100 gabinetes, 100 plazas de hospital de día, unidades de apoyo al diagnóstico y tratamiento, de farmacia ambulatoria y un área de rehabilitación, además de los espacios de apoyo como espacios administrativos, de informática y de trabajo para profesionales.
El nuevo edificio, que se empezará a construir en 2024, y tendría que estar acabado en 2026, forma parte del nuevo Vall d'Hebron, una transformación, según aseguran sus dirigentes, que no solo implica mejorar las infraestructuras y los equipamientos del hospital, sino que "supone una transformación organizacional y competencial de los profesionales e intensificar la colaboración con la atención primaria y las instituciones presentes en el área de referencia territorial". Trasladar la actividad ambulatoria del Vall d'Hebron, que cada año moviliza un millón de visitas, a las nuevas consultas supondrá una modificación radical del flujo de pacientes. El conseller de Salut, Josep Maria Argimon, que se encargó de presidir el acto, aseguró que estos conceptos de accesibilidad y capacidad de resolución suponen "una concepción diferente de trabajar" en una atención ambulatoria que "día a día va ganando peso".