La Asociación de Vecinos de Terramar de Sitges se opone frontalmente a los intentos de reabrir la discoteca Atlántida, cuyos promotores han aumentado en los últimos meses la presión para levantar la persiana de un local que lleva cerrado desde 2014 en aplicación de una sentencia firme del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC).
Desde la Asociación de Vecinos, recordaron este lunes en un comunicado que existen diversos motivos, desde jurídicos hasta ambientales, para mantener el cierre de la discoteca, y emplazaron al Ayuntamiento a posicionarse firmemente en contra de reabrir un espacio que siempre ha supuesto “un dolor de cabeza” para los lugareños.
El barrio de Terramar ha sido históricamente uno de los principales damnificados por la actividad de la Atlántida. Durante años, los vecinos tuvieron que soportar “una elevada contaminación acústica, tanto por la música de la discoteca como por los botellones masivos de los clientes que se producían en las calles”.
El “incivismo” de los clientes de la Atlántida era palpable “todos los días de la semana”. Además del ruido, las calles se llenaban de basura, rompiendo la harmonía de la ciudad jardín de Terramar, una de las zonas más verdes de Sitges. También “se producían peleas” a la salida de la discoteca que afectaban al descanso de los vecinos y aumentaban la sensación de inseguridad en el barrio, cosa que dicen que no ha sucedido durante el tiempo que ha estado inactiva.
Incompatible con la preservación del medio natural
Desde la asociación de vecinos de Terramar recordaron que la discoteca se vio obligada a cerrar en 2014 por un incumplimiento flagrante de la ley. La Justicia quien dictaminó el cierre de la Atlántida por invadir una zona preservada por la ley de costas. Asimismo, que la Atlántida tiene otra sentencia firme del TSJC en contra por no actualizar la licencia ambiental. Sin embargo, la reciente autorización para derribar una parte de la discoteca ha aumentado los rumores sobre la posible reapertura de la discoteca.
El cierre de la Atlántida se hizo efectivo durante el gobierno del Ayuntamiento anterior, quien se opuso a los intentos de los promotores de reabrir el local. Ahora, bajo el mandato del nuevo Ayuntamiento, los promotores han redoblado sus esfuerzos por reabrir la Atlántida.
Según ellos, la intención es reabrir como un ‘beach club’, aunque desde la asociación remarcan que todos los proyectos vinculados a la Atlántida y sus propietarios (Martín Ferrer, dueño de Amnesia de Ibiza, entre otros) están vinculados al ocio nocturno masivo, y por lo tanto no son compatibles con las leyes indicadas anteriormente.
Los vecinos denuncian que la actividad de una discoteca (o de un ‘beach club’ enfocado al ocio diurno o nocturno) conllevaría “una serie de perjuicios incompatibles con preservar el medio natural”. Entre otros, “aumentaría la contaminación acústica, la contaminación lumínica, se produciría una sobre frecuentación, mayor generación de residuos y una afectación directa sobre la flora y particularmente sobre la fauna de la zona que de encuentra en vías de recuperación, en concreto varias especies de aves marinas”.
Por todo ello, la asociación de vecinos de Terramar hizo un llamamiento a todas las autoridades competentes en estas materias “para que se respeten las leyes y las sentencias judiciales firmes vigentes, en aras de preservar una de las zonas más naturales y ricas en biodiversidad de Sitges, la playa de las Coves de Sitges, donde se encuentra la antigua discoteca”. Recalcan que se trata de una zona que forma parte de la Xarxa Natura 2000, una red de conservación de la biodiversidad protegida por la Unión Europea.