La víctima de la Mandada ha hablado después de que el Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN) haya rebajado un año la pena de prisión impuesta a uno de los cinco condenados por la violación grupal de los Sanfermines del año 2016. "Otra vez me dejan entre las patas de los caballos, no podré rehacer nunca mi vida", ha afirmado la joven, según han explicado personas de su entorno a Caso Abierto. Este martes se ha hecho pública la decisión de la Sala de lo civil y Penal del TSJN de reducir la pena a Ángel Boza, al considerar que el mismo Tribunal Supremo señaló en su sentencia que imponía una condena "próxima" al mínimo legal, unos mínimos que la ley del 'solo sí es sí' rebajó "sensiblemente".

La abogada de la víctima, Teresa Hermida, ha señalado que esta rebaja supone un duro golpe al proceso de recuperación de la joven, que hace siete años que está en tratamiento psicológico y ha tenido que abandonar sus estudios universitarios. "Esta decisión judicial para ella es la gota que colma el vaso en un proceso al que la chica no ve el final", ha señalado en declaraciones al citado medio, donde ha expuesto que "tiene la sensación que no la dejarán nunca superar lo que ha sufrido". "Cuando parece que está saliendo adelante, con mucho esfuerzo, siempre llega algo que la devuelve al día de la violación y vuelta a empezar", ha asegurado.

La víctima de la Mandada recurrirá la rebaja de la pena

La defensa de la víctima también ha anunciado que recurrirán la rebaja de condena -- que pasa de 15 a 14 años de prisión -- al considerar que los magistrados no han tenido en cuenta la gravedad de los hechos. Si bien todavía tienen que analizar con profundidad la resolución que reduce el castigo penal a Ángel Boza, la abogada ya ha adelantado que su intención es recurrirla al Tribunal Supremo, según ha confirmado a la agencia Efe. Una de las posibilidades para presentar este recurso es el voto particular de una de las magistradas.

Los magistrados Joaquín Galve Sauras, presidente del TSJN y ponente de esta, y Francisco Javier Fernández Urzainqui han adoptado la resolución, mientras que la tercera miembro de la Sala, Esther Erice Martínez, ha formulado un voto particular en el cual desestima la revisión de condena. Por una parte, los dos magistrados favorables a la rebaja argumentan que la reforma en la ley del 'solo sí es sí' "es más favorable" para el condenado y consideran "razonable conforme con la legalidad, respetuoso con las reglas legales básicas de determinación de la pena y acomodado a los criterios de proporcionalidad" del Tribunal Supremo aplicar esta reducción.

Por el contrario, la magistrada Esther Erice expone que en ningún caso procede la solicitud de rebaja de condena, ya que ni siquiera en una aplicación meramente aritmética resulta procedente. Asimismo, añade que "se tiene que atender no solo a la proximidad de la pena de 15 años al nuevo mínimo posible, sino también a la gravedad de los hechos". Un argumento compartido con la defensa de la víctima de la Mandada, que estima que el Tribunal Superior de Justicia no ha valorado correctamente ni la legislación aplicable ni la gravedad de los hechos, que sí que determinó el Supremo en la sentencia.