Vista clave. El Tribunal Supremo, presidido por el magistrado Manuel Marchena, ha celebrado una vista, este miércoles, para escuchar los siete recursos presentados por las defensas contra la sentencia de la Audiencia Nacional, que condenó a Driss Oukabir, Mohamed Houli Chemlal y Said bien Iazza de pertenecer a grupo terrorista, pero no por los 16 asesinatos que el grupo de jóvenes de Ripoll radicalizado, —formado por amigos y hermanos de los condenados— provocó en Barcelona y Cambrils el 17 de agosto de 2017, como reclama un grupo de víctimas. Tres acusaciones han reclamado al tribunal, formado por cinco magistrados, que haga repetir el juicio para que se puedan juzgar los crímenes de la Rambla y de Cambrils y aclarar si se pueden atribuir a Oukabir y a Houli.
Las acusaciones que han pedido repetir el juicio son: el abogado José Antonio Bitos, en nombre de los 4 agentes de los Mossos de Esquadra, que abatieron a los terroristas en Cambrils y Subirats, y víctimas de los hechos; la abogada Mònica Fando, en nombre de uno de los mossos, y también el abogado Agustí Carles, que junto con Jaume Alonso-Cuevillas, ha llevado la acusación de víctimas, y en esta vista de Javier Martínez —padre de Xavi, el niño de 3 años de Rubí muerto en la Rambla por el conductor asesino Younes Abouyaaqoub, abatido en Subirats—, que a también exige que se aclare si el imán de Ripoll, líder del grupo, está realmente muerto.
La condena, limitada a Alcanar
En la sentencia, de mayo de 2021, la Audiencia Nacional impuso 53 años y seis meses de prisión a Mohamed Houli Chemlal y 46 a Driss Oukabir por delitos de pertenencia a organización terrorista; tenencia, depósito, así como fabricación de sustancias o aparatos explosivos e inflamables de carácter terrorista; y estragos en tentativa de carácter terrorista en concurso con 29 delitos de lesiones por imprudencia grave. Además, condenó a Saïd bien Iazza, a 8 años de prisión por el delito de colaboración con organización terrorista y le impuso, además, la inhabilitación absoluta y especial, así como la prohibición de acercarse a Alcanar durante cinco años desde que cumpla la pena de prisión. En el caso de Ben Iazza sorprendió la petición del mayo pasado del Gobierno para expulsarlo del país, medida a la cual se opusieron las acusaciones y la Fiscalía porque la sentencia no es firme y la Audiencia Nacional lo descartó.
Las reclamaciones
A la vista de este miércoles, ha asistido de público Javier Martínez, acompañado de Robert Manrique, víctima de Hipercor y coordinador de la UAVAT, unidad que ha ayudado a localizar gran parte de las víctimas del 17-A, y ahora parada por falta de apoyo institucional. En la sentencia, la Audiencia Nacional reconoció a 117 víctimas de los atentados, 72 de ellas con informes de la UAVAT y personadas con la Associación 11-M y descartadas inicialmente por el Gobierno como víctimas de terrorismo.
Al salir de la vista, Bitos ha explicado a ElNacional.cat que en el juicio en la Audiencia Nacional, el tribunal, presidido por Alfonso Guevara, limitó el enjuiciamiento de los hechos a lo que pasó en Alcanar, y por eso han pedido ahora al Supremo que ordene repetir el juicio para poder juzgar a Dris Oukabir y Mohamed Houli como coautores o colaboradores de los asesinos, abatidos por los Mossos. En este sentido, el penalista recuerda que "Houli alquiló la furgoneta que después conduciría al asesino Younes y que alguna responsabilidad debe tener".
Paralelamente a esta causa penal, Bitos llevará a juicio al Departament de Interior, para que indemnice con un total de 1.214.000 euros por los daños y perjuicios sufridos a los cuatro agentes de los Mossos, que abatieron a seis de los jóvenes integrantes de un grupo terrorista en Barcelona, Cambrils y Subirats. El Govern no lo acepta porque considera que son víctimas de terrorismo y les tiene que indemnizar al Estado.
Investigación del imán
Por su parte, Agustí Carles ha pedido al Supremo que ordene al Estado español que investigue y aclare "las incongruencias" sobre el imán de Ripoll, Abdelbaki Es-Satty. Ha recordado que "de Alcanar se marchó una furgoneta blanca, justo cuando se produjo la explosión y no queda claro si era Es-Satty u otro terrorista". Entre los escombros de Alcanar, se encontró un trozo de oreja del imán y restos de Youssef Aalla, y la sentencia sostiene que ambos están muertos. El abogado también pide que las peritas de Marruecos que hicieron una prueba sobre familiares del imán lo expliquen en sede judicial y no solo su informe, como pasó en el juicio, y que se acepte la contra pericial presentada por los padres de Xavi.