Víctimas de abusos sexuales han acusado al Parlament de hacer un acto de "violencia institucional" y "retraumatizar" a las víctimas con la concesión de la Medalla de Oro a la Abadía de Montserrat. Así lo ha denunciado Enric Soler, víctima de abusos por un miembro de esta institución, después de registrar una carta en la cámara donde pedían a la Mesa que reconsiderara la decisión. "La Abadía puede haber hecho muchas cosas, pero una de las que también ha hecho es ser la zona cero de la crisis de la pederastia clerical en el país", ha afirmado en rueda de prensa. Soler ha insistido en que otorgar la medalla supone "premiar conductas profundamente peligrosas para el bienestar de la infancia" y envía el mensaje a las instituciones que si son poderosas y con buenos contactos políticos "pueden hacer lo que les dé la gana". En este sentido, ha lamentado también que "siempre se protege a la institución" y se silencia a las víctimas, enviándolas el mensaje de "yo no te creo". Además, ha añadido que la decisión hace "retroceder 50 años" y ha aseverado que en Catalunya hay una "dictadura nacionalcatólica independentista catalanista", donde se mantiene la hermandad con el poder eclesiástico.
Indignación con la mesa del Parlament
Soler ha aparecido acompañado de otra víctima, Miguel Hurtado, quien ha asegurado que nunca se había sentido "tanto violeta por una institución" cómo la Mesa del Parlament por esta decisión. En declaraciones a los medios, ha advertido que hay muchas vidas destrozadas por "esta lacra" y ha asegurado que lo que pasaba a la iglesia "lo sabía todo el mundo". "En estos momentos están abusando de niños en campamentos de verano y nosotros estamos aquí", ha declarado. Tanto Hurtado como Soler han considerado que el Parlament se ha "cargado" su credibilidad y han rechazado las palabras o los actos de homenaje a las víctimas de abusos sexuales si mantienen la medalla. "Que no cuenten con nosotros que se vayan a freír espárragos", ha lanzado Soler. Los impulsores de la carta han anunciado que si la cámara catalana no reconsideraba la situación y entrega la medalla, protestarán con una cacerolada en las puertas del Parlament el 10 de septiembre, día de entrega de las medallas.
El Parlament mantiene la medalla en Montserrat
Después de la presentación de la carta por parte de las víctimas de pederastia en la iglesia, la mesa del Parlament ha rechazado revocar la distinción en la abadía de Montserrat. Fuentes del órgano han explicado que a pesar de los "episodios gravísimos" de abusos, la Abadía de Montserrat es "una institución milenaria" y por eso otorgarán la distinción de medalla de Oro. La Mesa ha afirmado que condena y reprueba todos los abusos de la Iglesia, pero ha remarcado que precisamente la Abadía fue "una de las pocas instituciones religiosas" que se avino a participar en la comisión de investigación sobre la pederastia en la Iglesia. Fuentes de la Mesa garantizan el pleno "apoyo y empatía" a las víctimas y muestran "la condena y reprobación" a los abusos. También remarcan que durante la legislatura pasada se impulsó una proposición de ley para la imprescriptibilidad de estos delitos y subrayan que evitaron que la iniciativa decayera con el final de la legislatura y se garantizó que se siguiera tramitando. A pesar de la negativa de las víctimas, el presidente del Parlamento, Josep Rull, tiene previsto recibir a las víctimas para mostrarles "apoyo y empatía".
La Medalla de Honor es la máxima distinción que concede el Parlament y lo hace a personas e instituciones que son una referencia para el país o han sobresalido en su tarea. Se entrega desde el año 2000 y se ha condecorado a personas como el músico Jordi Savall, la cocinera Carme Ruscalleda o el entrenador de fútbol Pep Guardiola. También las entidades Cáritas Catalunya, la asociación de maestros Rosa Sensat o Òmnium Cultural, entre otros.