La Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) ha pedido 9 años de prisión para el exmiembro de ETA José Antonio López Ruiz, alias 'Kubati', y para Oihana Garmendia Marín, Haymar Altuna, Oihana San Vicente Saez de Cerain, Carlos Saez de Egilaz Murgiondo y Felipe San Epifanio San Pedro por organizar 120 actos de homenaje a presos de ETA entre 2016 y 2020, conocidos como 'ongi etorri'. A través de un comunicado, la entidad ha detallado que en su escrito de acusación solicitaba penas de 6 años por el delito constitución de grupo criminal y de 3 años por el delito continuado de humillación a las víctimas y enaltecimiento. La acusación se centra en las responsabilidades de los acusados —miembros de la Comisión presos de Sortu— en la dinámica Kalera Kalera, "encargada de la organización de los actos de homenaje a terroristas desde 2016, momento en el cual la última asociación creada para la defensa de los presos etarras, Herrira, fue ilegalizada."
Según explica la entidad en el comunicado, "asimismo, se pone el acento principalmente en la importancia que los actos de homenaje a terroristas cuando salen de prisión o cuando mueren, juega en favor de la estrategia orquestada por ETA para la legitimación de su actividad criminal además de para mantener cohesionado al colectivo de presos de ETA y a su entorno".
Efecto de los homenajes en las víctimas
La asociación destaca "el impacto negativo" que estos homenajes provocan en las víctimas del terrorismo, tal como lo evidencia el informe pericial que consta en las actuaciones "sobre el impacto psicológico de los actos de recibimiento y homenaje en las víctimas del terrorismo de ETA". Y añade que "además de un delito de constitución de organización criminal, se centre en un delito continuado de humillación a las víctimas y de enaltecimiento de los cuales han participado en actos terroristas". En el auto por el cual se acabó con la investigación, el juez Manuel García Castellón explicaba que, en la condición de miembros de la Comisión de Presos de Sortu, 'Kubati' y Garmendia Marín, junto con el resto de investigados, desarrollaron una actividad "tendente a organizar de manera sistemática y sistematizada los actos de homenaje a los presos, valiéndose a veces de la dinámica Kalera Kalera y en otras ocasiones de otros movimientos sociales o asociaciones, en función de las necesidades del momento concreto".
Así pues, el auto apuntaba que el desarrollo de la organización de los 'ongi etorris' y otros actos de homenaje a los presos de la banda terrorista se realizó, "a través de normas estrictas tanto en lo referente a qué presos se rendía tributo como por lo que concierne cómo se tenía que desarrollar el homenaje. Así, respecto del primero, explicaba, solo fueron tributarios de homenaje aquellos presos que se habían mantenido durante su cautividad dentro de la disciplina del colectivo de presos".