El envío de barcos militares de España al Mar Negro por el conflicto de Ucrania ha vuelto a poner sobre la mesa el debate sobre cuál tiene que ser el papel que tiene que tener el ejército español en pleno siglo XXI. Se trata de un debate histórico que sale a la luz cada vez que el Gobierno se posiciona militarmente en un conflicto. Esta vez vimos cómo la ciudadanía desenterraba el "no a la guerra", pero días después la cuestión se volvía a guardar en un cajón hasta la próxima ocasión. Lo cierto es que la desafección hacia el ejército no para de aumentar y mantenerlo cuesta más de 20.000 millones de euros cada año, un gasto que no para de aumentar.

En los últimos treinta años España ha participado en una cuarentena de misiones, en que algunas han sido guerras tanto sangrantes como la de Kosovo, Iraq o el Golfo Pérsico. ¿Qué hace ahora mismo el ejército? ¿En qué conflictos está participando?

 

El papel en el Oriente Próximo

En estos momentos España tiene más de 2.200 militares desplegados en 13 países. La misión en qué más tropas hay desplegadas es en el Líbano. Allí están desde 2006, después de la crisis entre Israel y Hizbulá, y ahora mismo hay unos 650 militares españoles que forman parte de los Cascos Azules de la ONU. Según informan oficialmente, intentan "evitar enfrentamientos con Israel" y dan apoyo al ejército libanés. La operación está prevista hasta el 31 de enero de este año, pero todo apunta que se renovará.

Muy cerca, España tiene operaciones en Turquía, donde hay un centenar de militares que utilizan un sistema de misiles para proteger el país de posibles ataques sirios. También tienen presencia al Iraq, donde asesoran al gobierno y trabajan conjuntamente con el ejército para "luchar contra el Daesh". Exactamente lo mismo que hacen en Túnez.

Soldados españoles en el Líbano / Europa Press

El conflicto más largo

Por otra parte, España también tiene operaciones en Bosnia-Herzegovina, que está donde más tiempo hace que están. Desde 1992 han pasado a más de 46.000 militares españoles. Primero, garantizaban el control del armamento de los países de la Antigua Yugoslavia con los Casos Azules, pero desde 2014 y hasta ahora se dedican a formar a las tropas bosnias.

Operaciones menores

Además, también hay varias operaciones militares en los mares. En el Mediterráneo, España tiene cinco equipos navales permanentes para la OTAN; en el Báltico tiene más de un centenar de militares desplegados para preservar la inviolabilidad de los cielos de las repúblicas báltico y en el océano Índico tiene misiones para luchar contra la piratería.

Europa Press

En el continente americano, el estado español tiene una operación en Colombia. Desde 2016 participan con las Naciones Unidas a hacer tareas de observación para hacer cumplir los acuerdos de paz de este país. Por último, en el África hay varias misiones en Mauritania, Mali, Somalia, en la República Centro Africana y al Golfo de Guinea. En la mayoría de casos ayudan a formar y asesorar a estos ejércitos.

Un ejército común de la Unión Europea

Ahora, la Unión Europea empieza su camino hacia la militarización. En el contexto actual, que desde Bruselas consideran peligroso e inestable, la UE se plantea organizar a partir de 2023 maniobras militares para intentar potenciar su capacidad de actuación. A partir del 2025 estas maniobras se acabarán convirtiendo en una fuerza de intervención operativa con hasta 5.000 militares.