Si, en un caso hipotético, y en medio de una de esas interminables discusiones que tanto abundan en las redes vas, me sueltas un exabrupto y yo te respondo con “Muy apropiado, pues tú peleas como una vaca” pueden pasar dos cosas: que no entiendas nada y pienses que no tengo gracia ninguna o que, por el contrario, que, con esa simple frase, descubras que, en esta vida, no hay nada más estúpido que perder tu tiempo insultándote con un desconocido que sabe quién es Le Chuck, donde está la isla Mêlée y está convencido, como tú, de que los videojuegos son el octavo arte. Vuelve Ron Gilbert, vuelve Monkey Island y vuelve nuestro amigo Guybrush Threepwood: desde el 19 de septiembre, puedes comprar en la plataforma Steam Return to Monkey Island
Una aventura gráfica de verdad
Y a mí; que crecí delante de un 386 clónico y todavía les hablo a mis hijos, cuando quieren discutir de sobre videojuegos, de Indiana Jones, Bobbin Threadbare y hasta de Sid Meier, porque además a de a aventuras gráficas yo jugaba al Civilization; se me saltan casi las lágrimas al saber que, este mismo mes de septiembre y si me aclaro con eso de comprar juegos en una plataforma, voy a poder volver a ver en la pantalla de mi PC al amigo Guybrush y levantarme alguno de estos días a las seis de la mañana, antes de ir al trabajo, convencido de que tengo la solución a ese acertijo que no me deja avanzar hasta el siguiente desafío que Ron Gilbert y su gente han colocado ahí para que Return to Monkey Island nos dure a todos entre tres y seis meses si jugamos sin guías o ayudas.
Arthur Morgan, es cierto, se pasea por un mundo casi real que poco o nada tiene que ver con los dibujos casi cubistas de las últimas ediciones de la saga Monkey Island y es, no lo niego, Red Dead Redemption 2 es una de las cimas de ese arte que es el videojuego, pero le falta algo y no es otra cosa que esa dificultad que tenían todas y cada una de las aventuras gráficas de Lucasfilm y que ayudó a una generación entera a ser más pacientes, más observadores y más capaces de encontrar soluciones distintas a problemas cotidianos. De hecho, porque muchas veces se jugaba en la versión original, hasta nos ayudó aprender inglés.
Por menos de 30 euros
Disponible desde este lunes, 19 de septiembre, en Steam para PC (22,99 euros) y en la eShop de Nintendo Swtch para esta consola portátil por 24,99; Ron Gilbert y su cuadrilla hasta nos han preparado un resumen de las aventuras de Guybrush para que recordemos aquellos años en los que fuimos piratas y el Caribe nos sonaba a aventura y siglo XVIII y no a aburrido viaje de bodas. Cuando me lo acabe, eso sí, rezaré al Dios Pirata para que lleguen pronto nuevas ediciones (si no son de Monkey Island y prefieren lanzar algo nuevo de Indiana Jones me vale igual) y, para mientras espero, me descargaré, aunque no fuera de Lucasfilm, la versión remasterizada gratuita de La Abadía del Crimen que ronda por ahí. Ah, y por cierto: si no te compras Return to Monkey Island habrá quedado merianamente claro que yo soy cola y tú, pobre infeliz, sólo pegamento.