Boeing, una de las principales compañías aeroespaciales del mundo, enfrenta una situación crítica con su programa Starliner. Desde su inicio en 2014, el desarrollo de la cápsula ha costado más de 1,850 millones de dólares, una cifra que ha desencadenado rumores sobre una posible venta del negocio espacial de Boeing para reducir pérdidas y mitigar los problemas técnicos y financieros que ha enfrentado.
La historia y las pérdidas del programa Starliner
Starliner fue concebido para competir con otros vehículos de transporte espacial como los de SpaceX, ofreciendo transporte tripulado hacia la Estación Espacial Internacional (ISS). Sin embargo, desde el inicio, el proyecto ha sufrido retrasos técnicos y problemas de diseño que llevaron a costosos ajustes. Boeing ha anunciado recientemente que las pérdidas en esta división siguen creciendo, y algunos expertos sugieren que, para minimizar el impacto, Boeing podría deshacerse del negocio espacial, posiblemente vendiéndolo por secciones o “piezas”.
¿Qué dice Boeing sobre el futuro del programa?
Kelly Ortberg, CEO de Boeing, ha mostrado cierta frustración con el desarrollo de Starliner y expresó en una reciente entrevista que la compañía está evaluando la mejor manera de mitigar los gastos y problemas generados por esta división. Ortberg asegura que no se ha tomado ninguna decisión final sobre vender el programa, aunque, según algunas fuentes, Boeing ha explorado opciones para el negocio, lo cual incluye vender Starliner o fragmentar la división.
De acuerdo con el informe del Wall Street Journal, las posibilidades para la venta o reestructuración están sobre la mesa, aunque existen obstáculos significativos, pues la venta de Starliner tendría que ser cuidadosamente coordinada para evitar problemas en otros contratos públicos y privados de Boeing. Al mismo tiempo, la compañía enfrenta desafíos en su imagen debido a informes que cuestionan la seguridad de sus tecnologías espaciales, lo que dificulta aún más una posible transacción de alto valor.
Un futuro incierto y las críticas a Boeing
A pesar de los esfuerzos de Boeing, el futuro de Starliner y de su división espacial sigue siendo incierto. Las críticas apuntan a los constantes problemas técnicos del programa y a la falta de avances significativos, lo que ha levantado dudas sobre si Boeing tiene la capacidad de competir en un sector aeroespacial que se vuelve cada vez más dominado por nuevas empresas tecnológicas.
Además, Boeing ha enfrentado cuestionamientos adicionales, con acusaciones sobre problemas en su sistema de calidad y transparencia, especialmente en relación con la seguridad de los astronautas que utilizarían Starliner. Estas acusaciones han afectado la credibilidad de la compañía y su posición en la industria, aumentando las especulaciones sobre si una venta del programa es la única salida viable para Boeing.
Asimismo, y después de todo lo expuesto, la situación con Starliner es crítica, y el potencial de venta del negocio espacial de Boeing puede representar un cambio importante en el sector. Si bien aún no hay una confirmación oficial, es claro que la compañía enfrenta decisiones difíciles para estabilizar sus operaciones aeroespaciales y recuperar la confianza de sus clientes y socios.