Hace unas semanas explicábamos en esta misma sección cómo el polvo de hierro podría convertirse en el combustible del futuro. Ahora, otro metal, en este caso el aluminio, sorprende también como alternativa energética viable. Te explicamos cómo se haría.
Aluminio recargable
El proyecto se está desarrollando actualmente en el Instituto SPF de Tecnología Solar de Suiza, donde se plantea para el aluminio un proceso similar al que se quiere aplicar al hierro: mediante la oxidación-reducción, el aluminio puede servir para producir y almacenar energía. De hecho, los responsables de la iniciativa han calculado que su densidad energética es 50 veces superior a la de los iones de litio que usamos en las baterías actuales.
Energía para dos años
Con el proceso que desarollan en el Instituto SPF, sería factible almacenar en un bloque de aluminio de 1 metro cúbico hasta 23,5 Mwh, cantidad que basta para abastecer de energía a un hogar medio europeo durante dos años. La energía específica del aluminio, han calculado, equivale a 8,7 kWh por kg y es arias decenas de veces superior a la de las baterías de los coches eléctricos. Para cargar de energía un bloque de aluminio, indican, basta con un electrolizador industrial provisto de electrodos inertes y capaz de lograr que el aluminio almacena energía con una eficiencia cercana al 65%. Lo peor de todo es que, en casa, hemos cambiado las ventanas de aluminio por otras de PVC para, nos dijeron, ahorrar energía.