Que el cambio de postura del Gobierno de España sobre el Sáhara Occidental no gusta en Argelia no es ningún secreto, pero el gobierno del más poblado de los países del Magreb no ha sido, de momento, contundente en exceso en relación a esta cuestión para ellos estratégica. ¿Por qué? El origen del gas que importa España lo explica.
El principal suministrador
Argelia ha reafirmado este verano su papel como principal suministrador de gas natural a España. Así, en agosto, el 34,6% del total de las importaciones tenían sello argelino. Por detrás quedan Rusia (23,6%) y Estados Unidos (18,2%). El país africano ha suministrado este mes de agosto a España un total de 8.865 GWh a España y consolida así su tradicional papel de proveedor principal de gas al país, del que tan solamente se vio desbancado en 2022 por Estados Unidos. En el acumulado anual, Argelia se refuerza como principal suministrador con 69.080 GWh, el 36,2% del total, también por delante de Rusia (22,8%) y de Estados Unidos (18,3%), según Enagás.
¿Y en el futuro?
El, si nadie lo remedia, seguro cierre de todas las nucleares que aún operan en España comportará la obligación, hasta el Gobierno lo admite, de construir nuevas centrales de ciclo combinado para garantizar un suministro continuo que los complejos de renovables no pueden ofrecer. Ahí llegados, por supuesto, Argelia está llamada a seguir siendo el proveedor principal y el gran privilegiado de una decisión política (el cierre de las nucleares) que no tiene sentido en términos económicos, especialmente teniendo en cuenta que las centrales nucleares españolas están ya amortizadas, que la industria nuclear española es ejemplo para otros países europeos y que la UE considera la producción de energía mediante ingenios nucleares un método sostenible. En Argelia, visto el posicionamiento pro-marroquí del Ejecutivo español, tienen ya preparada una factura que España pagará más pronto que tarde. Al tiempo, en lo que se refiere a los almacenamientos subterráneos españoles, se encuentran a cierre de agosto en el 100% de llenado, mientras que las plantas de regasificación están en cerca del 66% de llenado de tanques.