La Generalitat, mediante el Departamento de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica, trabaja ya en el impulso a la reintroducción del ibis ermitaño en Catalunya. Este pájaro que se dio por extinto en la costa Mediterránea hace unos 300 años y, durante las últimas décadas, diferentes iniciativas público-privadas han dedicado recursos y esfuerzos a recuperarla. La actuación se encuentra en fase de estudio de viabilidad e idoneidad del macizo de Montgrí, la zona planteada para desplegar ya el proyecto la primavera de 2025.
2.000 ejemplares en toda Europa
Desde la década de los 90, el ibis ermitaño ha recuperado su población en Europa hasta 2.000 ejemplares gracias a la crianza controlada en zoológicos de Austria y Alemania. El paso siguiente ha sido promover la liberación progresiva de estos ejemplares y facilitar su migración en zonas más cálidas. Desde la entidad Waldrappteam Conservation and Research, dirigida por el biólogo Johannes Fritz y que cuenta con fondo del programa LIFE de la Unión Europea, se impulsa, explica la Generalitat, "un ambicioso programa" de guía de esta especie asistida por humanos durante un viaje de 2.800 kilómetros hasta Cádiz, donde vive una comunidad de ibis sedentaria.
Catalunya, territorio objetivo
Vista la situación favorable de Catalunya, en medio camino entre origen y destino del viaje migratorio de estas aves, se convierte en una gran oportunidad para reintroducirla en un territorio que, actualmente, es solo zona de paso. La bandada de este año, integrada por 36 ibis guiados por dos 'madres adoptivas' que vuelan en ultraligeros, se encuentra descansando en Ordis, al Alto Empordà. El objetivo es que estos ejemplares aprendan la ruta y puedan hacerla de vuelta más adelante. El espacio propuesto para la recuperación de estas aves es la finca Torre Ponsa, situado en el macizo del Montgrí, y cuenta con el visto bueno de Johannes Fritz, director de Waldrappteam Conservation and Research. Asimismo, La fundación ALIVE, de la cual es presidente el biólogo Bernat Garrigós, y la entidad Amigos de los Pantanales y del Patrimonio Natural del Empordà (AAPNE) han mostrado su interés en participar en este proyecto impulsado por la Generalitat de Catalunya.