Cepsa, una de las firmas españolas históricas del sector petrolero, ocupa a miles de personas en todo el mundo y tiene su sede principal en Madrid, ciudad en la que emplea a unas 2000 personas que se reparten entre la Torre Foster y otros emplazamientos como la Torre Picasso y el Edificio Helios. Como tantas otras compañías, ubica su cuartel general en un rascacielos, un tipo de edificio que, desde hace más de 100 años, es símbolo de poder y prestigio. Ahora, al menos en lo que a Cepsa se refiere, el paradigma va a cambiar. Cepsa quiere crecer en horizontal.
Unificación
La compañía quiere ahora unificar todas sus dependencias en un mismo enclave y, para ello, levantará un nuevo inmueble que aspira a convertirse en uno de los más sostenibles de España. El inmueble se ubicará en las cercanías de El Pardo y dispondrá de terrazas, balcones, patios y zonas verdes que sumarán 7.000 metros cuadrados. La actual sede principal, la Torre Foster, se sitúa junto a la Plaza Castilla, a unos 5 km de la futura sede. Ésta no será un rascacielos, sino un edificio horizontal
Otra manera de trabajar
Desde la compañía se quiere que la nueva sede sea un símbolo de su compromiso con las energías limpias y, también, con una nueva forma de trabajar en la que la transversalidad y los equipos serán fundamentales. Todo ello, explican sus responsables, se ajusta a la la estrategia horizonte 2030 de la compañía, denominada Positive Motion.