¿Has echado mano de ChatGPT últimamente para elaborar informes, discursos o cualquier documento que te haya requerido tu empresa? Pues ándate con ojo, porque ya hay compañías que, después de conocer de primera mano cómo funciona la herramienta y descubrir sus por ahora notables limitaciones, han prohibido a sus empleados hacer uso de ella con fines laborales. Según cómo, y tal y como temes, la IA puede acabar dejándote sin empleo, pero será mucho antes de lo que esperas y por motivos muy diferentes de los que imaginas.

OpenAI CEO Sam Altman  EFE

OpenAI CEO Sam Altman EFE

Errores y filtraciones

De momento, ChatGPT carece de la posibilidad de realizar búsquedas en línea y elabora todas sus respuestas a partir de la información que se cargo originariamente en sus bases de datos y de la que ha recopilado durante las interacciones con usuarios llevadas a cabo durante los últimos meses. Por ello, la probabilidad de que la información que facilita la herramienta sea errónea es ciertamente notable. Éste, sin embargo, no es el único riesgo: si al usarlo no especificas lo contrario, ChatGPT almacena todos los datos que facilitas –y también otros que obtiene de tu correo, ubicación y demás- en su base de datos. ¿Pueden producirse filtraciones? En principio, no debería ser así, pero, cuando se trata de ciberseguridad, es mejor prevenir que curar.

Prohibiciones

Al tiempo que se ha redactado ya un manifiesto en el que han puesto su firma Elon Musk y Steve Wozniak, entre otros; cada vez son más las empresas que han prohibido a sus empleados echar mano de ChatGPT y herramientas similares. Entre ellas figuran Apple, Telefónica, BBVA y Redeia. Naturgy y Enagás han redactado protocolos para fomentar un uso responsable y Mapfre y Repsol están en ello. Por suerte, todo indica que, de momento, Skynet pertenece sólo al ámbito de la ficción. En la UE se trabaja ya en una normativa. Sea como fuere, no olvides que, a través de las cookies y otras herramientas, ChatGPT puede recopilar, además de las ifnormaciones que facilites en tu interacción con la herramienta, los datos de tur ordenador, tus datos de contacto, el navegador que usas y hasta tu información de pago.