El baño es un espacio clave para garantizar que una vivienda es sostenible: todo lo que se utiliza allí (y en ese todo cabe desde el agua a los productos de higiene personal, las griferías o los sistemas de iluminación) tiene un impacto sobre el medio y, lo más importante, sobre nuestro bolsillo, así que tú decides. Nosotros, de momento, te dejamos cuatro consejos para que puedas disponer de un baño tan sostenible como sueñas.
Más ventanas y, si hace falta iluminación extra, sistema LED
Los baños, a menudo, son habitaciones sin ventanas y eso, siempre, es un error porque no hay nada como la luz natural. Si no tienes ventana y habilitar una resulta muy difícil o no te apetece por razones de privacidad, piensa en una efectiva y discreta claraboya o, también, aprovecha la luz de las estancias colindantes con vanos traslucidos en la parte superior de las paredes o sustituye la puerta opaca tradicional por un cristal que deje pasar algo de luz. Asegúrate también de que los sistemas de luz artificial que hayas de utilizar son LED, ya que ahorrarás hasta un 80% en la factura.
Sistemas de ahorro de agua
Las griferías con sistemas de ahorro, los inodoros de doble descarga y la ducha con dosificador inteligente son obligatorios. Mantener la bañera es posible si no quieres renunciar a disfrutar alguna que otra vez de un baño, pero hazlo con cuidado, porque un uso intensivo de la bañera supone despilfarrar agua y energía. Aunque, con ello, reduzcas tu nivel de estrés. En todo caso, para el día a día, la ducha es obligada y, además, asegúrate de que es corta: con seis minutos hay de sobra.
No utilices cualquier producto
Sí, de acuerdo: los productos de higiene más respetuosos con el medio son más caros, pero ganarás en salud y bienestar. Las esponjas naturales, el papel higiénico reciclado, los geles y jabones ecológicos y, no te olvides, hasta el mobiliario que utilices deben ser ecofriendly.
Buen aislamiento
Todo lo antes dicho sirve de muy poco si los forjados de tu baño y los sistemas de aislamiento son ineficaces y te hacen perder energía y bienestar. Revisa tu baño con un experto y asegúrate de que todo está construido como se debe para que la energía que consumas revierta íntegramente en tu confort.