Vale, de acuerdo: sabemos que, en realidad, la sostenibilidad y la revolución verde te importan menos que tu bolsillo y, en una coyuntura económica tan compleja como la actual, todavía es más lo que te interesa poder cuadrar tus cuentas a final de mes. Si te decides por electrificar tu movilidad será, ante todo, por razones monetarias, así que vamos a ser claros y a explicarte cuánto puede ahorrarte un coche eléctrico a final de mes.
Los carburantes no van a bajar
Y no, los carburantes no van a bajar y, aunque la electricidad suba, siempre será más barata que llenar un depósito con gasolina o diesel. Además, los coches de combustión tienen fecha de caducidad y, tanto es así, que incluso marcas históricas como Renault se desprenden de sus fábricas de vehículos con motor térmico. A la larga, este tipo de vehículos pagará tantos impuestos que se convertirán un artículo de coleccionistas. Vamos pues, sin más a ver cuánto puede costar en España recorrer 100 kilómetros en un coche eléctrico
Menos de la mitad de lo que cuesta llenar un depósito
Según el Ministerio para Transición Ecológica y el Reto Demográfico, recargar en una electrolinera una batería de 50 kWh puede costar un máximo de 39,5 euros, eso si contamos que un kWh en estas instalaciones puede costar entre 15 y 80 céntimos de euro. Si la recarga la haces en tu casa, el precio se abarata todavía más: el kWh cuesta entre 20 y 50 céntimos y eso supone un máximo de 25 euros. Una batería completa puede permitir recorrer unos 400 km, lo que quiere decir que cada 100 km que cubrimos con un coche eléctrico nos cuestan entre 3 y 6 euros euros en función de dónde recarguemos y cada, 1.000, entre 30 y 60 euros. Fijemos, por tanto el punto medio (45 euros) como la referencia de lo que nos costaría circular 1.000 km. La misma distancia con un vehículo de motor térmico común, de esos que consumen 6 litros cada 100 km, implicaría gastar 60 litros de combustible y, si contamos que la gasolina cuesta hoy en España unos 1,6 euros el litro, bonificaciones incluídas, 1.000 km en un coche de combustión nos costarían 96 euros. En suma, menos de la mitad. Tú eliges.