Hoy 6 de enero, y diga lo que diga alguna que otra iluminada británica, el carbón ha vuelto a ser regalo habitual en muchas casas. Es, por supuesto, carbón de mentira (no es otra cosa que un dulce preparado con azúcar, clara de huevo, zumo de limón y colorante alimentario), pero eso no debe hacernos olvidar una realidad: por mucho que determinados colectivos se empeñen, el negro mineral en el que este dulce tradicional se inspira sigue siendo necesario. La UE, territorio en el que (se supone) está proscrito porque su uso es un lastre inaceptable para la revolución verde sigue contando con dos países en la lista de diez mayores productores del mundo.
China e India, los que más carbón sacan
Con todo, los mayores productores de este mineral que en España ha dado vida a comarcas enteras de León, Asturias, Palencia, Córdoba, Ciudad Real y Teruel (entre otras) e inspirado canciones sublimes como Planta 14 y novelas gráficas excelentes como La Balada del Norte son China e India. En China, sólo en 2021, se extrajeron 4.126 millones de toneladas de negro mineral y en India, 811. Y es así porque el carbón (barato y abundante) es allí motor de desarrollo como lo fue en su día en Europa y Norteamérica y, por tanto, sería de hipócritas, negar a aquellos países el salvoconducto barato a una vida mejor que la industrialización siempre garantiza y que el carbón permite comprar imponiéndoles energías más caras que no ofrecen todavía continuidad de suministro como la eólica o la solar. De nuclear, mejor ni hablemos, porque está todavía más proscrita por los de siempre que el humilde y fiable carbón.
¿Y después?
En tercera posición, con 613 millones de toneladas, queda Indonesia y, justo detrás, aparecen Estados Unidos y Australia, con 524 y 478 millones de toneladas extraídas en 2021, respectivament. El sexto productor mundial es Rusia, con 433 millones de toneladas, y el séptimo, Sudáfrica, con 234. Alemania, con 126 millones (casi todo lignito para uso térmico) es el octavo productor mundial y el noveno es Kazajistán, con 115. Polonia, también miembro de la UE como Alemania, es el décimo productor mundial con 107 millones de toneladas. A España, donde quemamos en 2021 unos 5 millones de toneladas importadas en su mayor parte y producíamos hace diez años unos 10 millones de toneladas, ni se la ve en la lista ni se la espera. Si hemos de seguir quemando carbón, y todo indica que sí, quizá estaría bien empezar a hacer como en Inglaterra.