Amazon, Twitter, Microsoft, Meta, Google, Philips, Cisco y, ahora, también Disney. Entre los cerca de 150.000 despidos de 2022 en el sector tecnológico y los cerca de 100.000 que, ejecutados o anunciados, llevamos ya en este 2023, un cuarto de millón de personas que trabajaba en empresas tecnológicas se ha ido a la calle. El último anuncio lo ha realizado Bob Iger, consejero delegado de Disney. En este caso, van a despedir a 7.000 de los 220.000 empleados del grupo.

 

Quieren gastar 5.500 millones menos

Los despidos forman parte de un plan de ajuste del gasto que asciende hasta un total de 5.500 millones de euros. 3.000 se ahorrarán produciendo menos y , de los otros 2.500, la mitad saldrá de recortar el gasto en marketing y promoción, 500 en reducir la inversión tecnológica y 750, de recortar la plantilla.Son las previsiones del consejero delegado de la firma, que da por hecho que podrá conseguir enderezar el rumbo de una compañía que acumula fracasos relativos con filmes como la caída de suscriptores en sus servicios de streaming, donde ha perdido 2'4 millones de usuarios. La mayoría de ellos disfrutaban de Disney+ Hotstar, la plataforma que la firma tiene en India. Haber perdido allí los derechos de emisión de la liga nacional de cricket explica el dato. Sin embargo, esa mengua de suscripciones no se ha traducido en pérdidas, pues Disney ha experimentado una subida del 8% en los beneficios del trimestre: 23.000 millones de dólares 

Nuevas producciones

Durante los próximos meses, la compañía se centrará en productos que dan por hecho se convertirán en éxitos seguros como, por ejemplo, las nuevas entregas de Toy Story, Frozen y Zootropia. Sea como fuere, está claro que, al menos en Estados Unidos, trabajar en una empresa tecnológica se ha convertido en un deporte de riesgo. ¿Será Netflix la siguiente empresa en anunciar despidos? Todo dependerá de en qué queda su último envite contra los usuarios.