¿Sabes qué es una batería estacionaria? Quizá no pero, quien seguro que sí lo sabe es Elon Musk, ya que las fabrica y lo hace, además, con tanto éxito, que las tiene agotadas hasta 2024. Su nombre comercial es Megapack y comprar uno de estos ingenios cuesta 2,5 millones de dólares.
¿Qué son?
Las Megapack sirven como reservori energético para centrales eléctricas, subestaciones, grandes instalaciones industriales o, incluso, polígonos enteros. Se venden por módulos y el más pequeño puede almacenar 3,9 MWh de energía y ofrece una potencia de 1,9MW. Con un MWh se puede, por ejemplo, suministrar energía a 330 viviendas, así que un módulo de este tipo soluciona las necesidades de un pueblo de 1.300 vecinos, que son, más o menos, los que tiene el mío, Barruelo de Santullán.
Gran demanda
Las Megapack se fabrican en una factoría situada en Nevada y en otra ubicada en Lathrop (California) e inaugurada este mismo año y en la que Tesla espera producir unidades con una potencia total de 40 Gwh. La demanda esenorme porque, en las actuales circunstancias, se da por hecho que los cortes eléctricos derivados de guerras, desastres naturales o incidencias diversas se van a mantener en los niveles actuales o, incluso, a aumentar, ya que la demanda de energía crece y la capacidad de generación, especialmente desde que fiamos casi todo a las renovables; que tienen serios problemas, si no median sistemas de almacenaje, para garantizar la continuidad del servicio. Sin duda, y mientras entretiene (y despista) al mundo con sus majaradas en Twitter, Elon Musk está convirtiéndose en alguien imprescindible si que nadie más que unos pocos se den cuenta.